Capítulo: #8
“Conmigo conocerá el amor”
Gerard terminó de guardar la ropa en la cómoda de la habitación de hotel en San Francisco, se sentó en el suelo con las piernas cruzadas, mirando fijamente la gaveta cerrada, solo pensaba en Frank y Noe, y en ese extraño juego mental en que había metido al chico, sí, Gerard Way aceptaba que tenía ciertos sentimientos hacía él, pero su motivación principal era sencillamente sabotear a Frank.
Iero cerró cuidadosamente la puerta de la habitación de Gerard preguntándole si había terminado de desempacar, pero el vocalista no le escuchó, avanzó hasta pararse detrás de él, sentándose en el suelo, con Gerard entre sus piernas y sus brazos aferrando desde atrás el torso de Way
- ¿En qué piensas? –
Gerard suspiró profundamente, tomando con sus manos los brazos de Frank
- Nada en especial –
- ¿Me amas? –
Sonrió acariciando repetidamente los tatuados brazos del guitarrista
- Sabes que sí –
- ¿Cuánto me amas Gerard? –
- Más que a la vida… más que a mí vida Frank –
Los brazos del guitarrista se apretaron con fuerza alrededor del cuerpo de Gerard
- No mientas –
- Frank me asfixias – Comentó divertido
- Y te voy a asfixiar de verdad si me mientes –
- No te miento –
Gerard intentó zafarse del abrazo, pero Frank apretaba con más fuerza cada vez
- Sí me amas ¿Por qué me dañas? –
- No entiendo… Frank suéltame –
- Te exijo que me digas cuanto me amas –
La respiración de Frank se agitaba más cada segundo, Gerard podía sentir el golpe de las exhalaciones en la base de su cuello, dejó de luchar contra los brazos de Frank, tratando de entender qué pasaba
- ¡Frank! Ya sabes cuánto te amo, deja este juego – Intentó levantarse, pero la presión de Frank era demasiada
- ¡Mientes! No me amas, si fuera así no me dañarías, no te esforzarías tanto en arrebatar algo que es mío –
Gerard se quedó en silencio, inmóvil, respirando con dificultad a causa de la presión que Frank ejercía con los brazos cruzados sobre su pecho
- Déjalo en paz – Susurró el guitarrista con su voz a punto de quebrar
- No –
Alcanzó a decir Gerard con sus dientes apretados, separando los brazos con suficiente fuerza para hacer caer a Iero de espalda contra el piso, girando él mismo con rapidez, sentándose luego sobre el abdomen de Frank y sosteniendo con firmeza las manos de éste entre las suyas
- ¡No, no lo voy a dejar en paz! Y déjame citar tus propias palabras Frank, “voy a hacer con ese chico lo que se me da la gana y durante el tiempo que me plazca” –
Los ojos de Frank estaban completamente inundados por lágrimas de celos, ira y decepción, aún con su visión empañada no dejó de mirar a Gerard ni por un segundo
- Solo lo haces para dañarme –
- No Frank, lo hago porque… - Gerard liberó las manos de Frank, deslizándose sobre su abdomen, recostó todo su cuerpo sobre el de Iero, acariciando repetidamente el rostro del guitarrista – Lo hago porque ese chico me tiene absolutamente cautivado –
- Mientes – Los labios de Frank comenzaron a temblar – Sé que mientes, tu… no puedes, Gerard… no puedes amar a nadie más que a mí –
Gerard sonrió, cerrando los ojos acercó sus labios a los de Frank, rozándolos apenas, chocando con suavidad la punta de su nariz sobre las redondas mejillas de su amante
- Egoísta, ¿No es gracioso Frank?, siempre dicen que el egoísta soy yo… es solo que no te conocen bien –
No respondió, Iero levantó sus piernas rodeando la pelvis del vocalista, presionando para que sus entrepiernas se encontraran
- Voy a dejar que continúes con tu jueguito, no tengo miedo ¿sabes por qué? –
Gerard relamió sus labios, empujó su cadera contra la pelvis de Frank, deslizando las manos por el torso hasta encontrar la base de la camisa que le retiró a Iero antes de preguntar “¿Por qué?”
Frank lamió sus labios también, despojando a Gerard de su camisa, bajando el cierre del pantalón del vocalista después de liberarlo del cinturón, metiendo su mano entre la ropa interior de Gerard, sonriendo lleno de seguridad
- Porque Noe me ama, y sé que si le pido escoger entre tú y yo, el me va a preferir –
Una enorme sonrisa se apoderó del rostro de Gerard, y sin dejar de sonreír, comenzó a besar despacio el cuello de Frank, deslizándose por su cuerpo, recorriendo cada tatuaje, cada pequeña acumulación de grasa abdominal, dedicándole segundos extra a besar y lamer con ansias el provocativo ombligo del guitarrista, siguiendo su recorrido hasta la parte baja de su abdomen dónde se detuvo un poco más, para desatarle el pantalón con los dientes, terminando de despojarlo de su ropa interior con ambas manos, tomando las piernas desnudas de Frank, y sonriendo sin dejar de verle el rostro, se llevó las piernas sobre cada uno de sus hombros, quedando de rodillas en el suelo, acariciando los muslos del guitarrista
- ¿Estás muy seguro de todo en la vida, no Frank? –
El guitarrista estiró un poco sus piernas sobre los hombros de Gerard, obligándose a sí mismo a despegar las nalgas del piso
- Si, tan seguro cómo que tú, Gerard Arthur Way, no has amado ni podrás amar jamás a nadie tanto como me amas a mí –
Gerard meneó levemente su cabeza, jugando con la lengua dentro de su boca, apretó la pierna derecha de Frank, e inclinándose un poco le mordió con fuerza la parte interna del muslo, mirándolo con atención después que Frank se quejó entre risas por el dolor
- No voy a negarte que en eso último tienes toda la razón, jamás amé ni amaré a alguien tanto como te amo a ti, pero… -
Frank levantó las piernas, alejándolas de los hombros de Gerard, sentándose frente a él
- Pero… -
El vocalista aprovechó el instante para retirar del todo su pantalón junto con su ropa interior
- Pero Noe es un chico muy frágil, y sé por experiencia, que contigo ha conocido el absoluto placer sexual, pero conmigo conocerá el amor –
Los ojos de Frank se abrieron por completo, sacudió su cabeza, y se arrojó violentamente sobre Gerard, aferrando el rostro del vocalista entre sus manos
- ¡Tú no puedes enseñarle a alguien a amar sin amarlo primero! ¿cómo harás para que Noe conozca el amor si no lo amas? –
A Gerard no le importó que Frank lo tuviese completamente dominado bajo su cuerpo, obvió el dolor que la presión de las manos de Frank producían en su rostro, y sabía perfectamente que lo que estaba a punto de decir lograría estallar la ira de Frank
- ¿De Dónde sacas qué no lo amo? –
Frank pudo estrangularlo, golpear repetidamente la cabeza de Gerard contra el piso hasta matarlo, o empuñar con fuerza sus manos y llenar de golpes el cuerpo del vocalista, pero no, en ese momento Frank Iero antes que rabia sintió un profundo dolor en su corazón que lo dejó sin fuerza alguna en su cuerpo, tan solo cerró los ojos, dejándose caer de lado en el suelo, cruzando ambas manos sobre su pecho, cómo si esta acción le evitara sentir tanto dolor.
Gerard Way sonrió por fuera, pero sintió morir su interior, esas palabras habían dañado a Frank, y como suele pasarle a las personas que aman de verdad, el dolor de quién se ama es más mortificante para sí mismo qué el dolor propio.
Pero había sido efectiva la acción, ahora Frank podía sentir en su propia alma el dolor que Gerard venía soportando desde el mismo momento en que Frank fijó su mirada sobre Noel Duncan.
Las manos de Frank fueron separadas con delicadeza, Gerard lo obligó a abrazarlo, mientras se tendía de lado, frente a él en el suelo de la habitación, flexionó sus rodillas, entrelazándolas con las de Frank, extendiendo la palma de su mano en la espalda de su amante que se negaba a hacer contacto visual con él. Lo apretó con fuerza contra su pecho, logrando que sus rostros quedasen separados apenas por un milímetro de aire
- Pero como te dije Frankie, a nadie podré amar más de lo que te amo a ti, jamás… -
Frank se dignó por fin a cruzar su mirada con la de Gerard, devolviéndole el abrazo, logrando que sus cuerpos se unieran aun más, levantó un poco el rostro para acercar sus labios al oído de Gerard
- Hay algo que debes saber –
Gerard No se movió, esperó a que Frank terminara la frase, pero algo en su interior le decía que no sería bueno lo que su amante tenía para decir
- Yo también me enamoré de él –
- Mientes Frank, tu solo lo deseas… no lo amas –
Gerard no sabe cómo pudo hablar, si sintió que su corazón se había detenido por completo, y que su alma había abandonado sin piedad su cuerpo; Frank pasó tímidamente la lengua sobre la oreja de Gerard, iniciando allí un recorrido de besos que rodeó el rostro del vocalista hasta finalizar en sus labios, y justo antes de besarlo Frank le aseguró:
- Pero no te preocupes Gerard, yo no soy capaz de amar a nadie tanto como te amo a ti –
Después de suspirar profundamente Gerard acarició el rostro de Frank
- Estamos jugando con fuego, esto debe terminar aquí y ahora antes que nos destruyamos –
- No Gerard, yo no estoy jugando, no hago esto para dañarte, no tengo ningún propósito oculto… yo, de verdad estoy enamorado de Noe, y sí para ti él es un juego, entonces detente, antes que le hagas daño… y termines de dañarme a mí también –
Gerard actuó como sí no lo hubiese escuchado, decidió, como siempre tragarse las palabras que revelarían sus sentimientos de dolor ante cada nueva confesión de su amante, empezó a deslizar sus dedos por entre las piernas de Frank, hundiendo cuidadosamente la punta de éstos entre la tibia cavidad, el cuerpo de Frank se estremeció por completo, Gerard no quería discutir más, se dedicó en cambio, a asegurarle a Frank que Noe jamás sería un amante tan completo como lo era él.
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