sábado, 23 de junio de 2012

Revenge seekers; Capítulo: #43

Capítulo: #43

Renacer.

Levanté a Gerard del piso, sentía que mis fuerzas me abandonaban, su rostro parecía el de un ángel, tan blanco, tan puro, lo cargué en mis brazos, sintiendo que en cada paso mis rodillas se estaban quebrando, mi corazón moría en cada uno de sus quejidos, eran tan silenciosos, pero a la vez tan desgarradores, no sé como logré entrarlo hasta el auto, Jacky me ayudó, y con él sobre nuestras piernas Sin arrancó, aprisa, las SUV nos seguían, las podía escuchar a lo lejos, no sabían donde estabamos pero estaban muy cerca, una de ellas nos alcanzó, saqué mi arma para dispararles, pero no podía soltar a Gerard, Jacky la tomó instintivamente, se arrodilló y sacó la mano por la ventana, disparando, no daba en el blanco, pero al menos sirvió para alejarlos un poco, Sin daba vueltas tratando de escapar, le pedí que nos llevara a un hospital.

- no Frank, tengo ordenes de ir al bar -

¿Ordenes de quién?, no me contestó, solo miró a Jacky por el retrovisor

"Frank"

La vos de Gerard era tan débil, apenas si pude oírlo pronunciar mi nombre, bajé mi cabeza hasta sus labios, para oír mejor

"No me dejes morir"

Sentí que el alma se me iba a escapar del cuerpo, acaricie su mejilla, con mi nariz, mientras besaba suavemente su piel

"no pienses en eso, vas a estar bien, no temas"

Se lo dije sin siquiera creerlo, su corazón... apenas si podía percibir esos leves latidos, se aferró a mi mano, la que sostenía el abrigo, apretando él también con fuerza

"has que se detenga, la sangre... no quiero que brote más"

Lloré, por primera vez en toda esa maldita noche, sin poder contenerme, lloré como un niño, por más fuerza que hiciera para detenerme, por más que intenté contener mis lagrimas, solo para darle fortaleza a Gerard, no pude... el dolor, y sobre todo el miedo se apoderaron de mi, el llanto de mis ojos caía sobre el rostro de Gerard, él levantó la mano y limpió mis lagrimas

"pareces un niño, llorando así... eres un bebe Frank"


Sonreí, lo miré directo a los ojos


"tengo miedo Gee, no quiero que te mueras"

Gerard pasó sus dedos por mis labios, delineándolos despacio, dibujó una pequeña sonrisa en los suyos

"yo también tengo miedo... no de morir, Frank, tengo miedo de no tener los días suficientes para darte este amor tan inmenso, tengo miedo de no poder crecer a tu lado, miedo de no poder envejecer contigo... miedo de dejarte sin mí"

Solo pude besarlo, besarlo con mi alma, con mi corazón, tratando de grabarme para siempre el sabor de sus labios, su dulce aliento, su aroma, traté de retirar mi rostro, pero Gerard puso su mano sobre mi cuello, sin soltarme, acercándome más, besándome mas, con fuerza, con pasión, en medio de su dolor, en medio de su agonía, procuraba darme el mejor beso de nuestras vidas, un beso para recordarlo por siempre, por si ya nunca más me pudiera besar de nuevo.

Llegamos al bar, todo era confuso, las chicas corrían de un lado a otro, pude distinguir la figura de Matt, el antiguo socio de Gerard, caminó hasta nosotros en compañía de dos hombres que arrebataron a Gerard de mis brazos a pesar de mis negativas, caminé junto a ellos, hasta el privado de Bob, que ahora parecía una sala de operación, lo acomodaron sobre la camilla, y el médico que había allí, empezó su labor, me querían sacar, me querían alejar, entre gritos y patadas logré convencerlos de dejarme allí, me quedé a su lado, mientras un enfermero se acercaba a anestesiarlo, tenía mi rostro sobre el suyo, mis manos en sus mejillas, haciendo que me viera, que se diera cuenta que estaba allí y que no lo iba a dejar, un par de manos lo alejaron de mí, girando su rostro hasta el lado contrario, levanté mi vista, Mikey tenía sus ojos llenos de lagrimas

"No te voy a dejar morir hermanito... ya estoy aquí contigo"

Gerard se quedó un momento mirando a Mikey, levantó su mano y toco la mejilla de su hermano, sonrió, justo antes de dejar que las lagrimas se escaparan de sus ojos

"Mikey, te amo, por favor, perdóname... por todo... yo no..."


La anestesia estaba haciendo efecto, impidiéndole hablar


"no me pidas un perdón que no necesitas, te amo Gerard, eres mi hermano, mi familia, todo esta bien... entre nosotros todo está bien"

Gerard se acercó a Mikey, no pude oír muy bien lo que le dijo, su tono de voz era demasiado bajo, Mikey me miró, para después asentir con su cabeza, mirando a Gerard a los ojos


"¿Qué te dijo?"

Sentía curiosidad, Mikey caminó, rodeando la camilla, parándose frente a mi.

"Solo me pidió, que te cuide y que por nada en este mundo te deje solo"

Matt entró hasta el privado, el médico luchaba con todos los recursos posibles de mantener a Gerard con vida, Matt me tomó con fuerza del brazo, sacándome casi a rastras de allí, me quedé perplejo al ver ese espectáculo en medio del salón principal del bar, las chicas de pie, armadas, listas para salir a matar a los Bloody Hunters


"aquí no puedes hacer nada Frank, tu conoces bien las entradas de la casa de los Hunters, llévanos, indícanos cual es la menos custodiada, Mikey, las chicas y yo, los vamos a matar a todos, me informaron que el Grandpa está muerto, y todas las ratas están congregadas dentro de la casa"

"lo sé, yo lo maté"

Todo en mi me obligaba a quedarme al lado de Gerard, no quería dejarlo solo, pero apremiaba esta misión suicida, vengarnos... por todos, por los padres de Gerard y Mikey, por Ray, por Bob...

No hay comentarios:

Publicar un comentario