Un instante para Noe; Capítulo: #27

Capítulo: #27

“¡Es una advertencia Noe!” 

Noe se recostó en la pared gris, tenía el ceño fruncido, estaba completamente molesto y ese estado aumentaba, entre más se reían Frank y Gerard

- ¡Hablo en serio! – Protestó

Gerard sentado en el suelo del camarín sostenía en una mano el lápiz de ojos negro con que se maquillaba, y con la otra mano sostenía su propio estómago, por si reventaba de risa

- Perdona, jaja, es que es imposible, IM.PO.SI.BLE Noe, que Mikey te haya dicho eso –

- ¿Crees que miento? – Se inclinó un poco hacia adelante

- Es que Mikey a duras penas sabe en qué día está… jajaja, lo peor es que me lo imagino como un Corleone, de sombrero y sobretodo negro - Frank se reía mirándose en el espejo, mientras se alistaba para salir a escena

El vocalista se levantó con dificultad, sin dejar de reír

- Creo que Brian tiene razón, estás usando drogas –

- ¡Maldita Sea! No les miento, ¿con qué motivo inventaría algo así?-

- Bueno, digamos que eso pasó – Gerard se calmó un poco, empezando de nuevo la tarea de maquillarse los ojos – Mikey no lo dijo en serio, solo te está jodiendo, ¿Qué daño podrías hacerme? Y si fuera así, jaja, Mikey no mata ni una mosca –

- Estaba molesto, retraído, muy extraño, no fue solo lo que dijo, sino cómo lo dijo, eso fue lo que me asustó –

- ¿Y no sería que lo soñaste? – Frank ajustó su zapatos, mirando hacia arriba a Noe

- Bien pasé de mentiroso a no saber distinguir de un sueño a un evento –

- Pero es posible Noe, tu mente no está funcionando bien últimamente –

Agregó Frank, logrando que Noe se enojara mucho más

- Muéranse los dos, yo para ustedes solo soy un chiste –

Frank no pudo evitar desencadenar nuevamente la risa, se sentó en el suelo, casi convulsionando por el reclamo infantil de Noe, el sonido rebotaba en el estrecho camarín, y Noe sintió que en cualquier momento colapsaría por la ira

- Me largo de acá, ustedes son lo peor –

Comenzó a caminar, pero Frank gateó en el suelo, aferrándose a las piernas de Noe

- Perdón, perdona, jajaja, pero es que es muy extraño que Mikey te haya dicho eso… - Profundizó el tono de su voz, hablando con un marcado acento italiano – Te lo advierto niñito, si dañas a Gerard Corleone, esta noche nadarás con los peces –

- ¡Suéltame Frank! No quiero verles más la cara –

Le fue imposible caminar, Frank lo sostenía con fuerza de las piernas

- Solo te dejo ir cuando te pase el enojo –

- Solo se me pasará cuando me crean –

- Yo te creo, creo que Mikey te dijo eso, pero estoy seguro que no lo dijo en serio – Habló Gerard que aun se veía en el espejo

- Yo también… mejor dame un beso, que quiero salir a tocar con el sabor de tus labios impregnado en los míos –

- Oh, que ternura… dale el beso Noe, que cuando yo salga a cantar le robo a Frank ese sabor, frente a cientos de miles de personas, tal como te gusta –

Noe dejó de luchar, respiró hondamente, fijó su mirada en Gerard, e inclinó un poco la cabeza hacía un lado, sin entender por completo las palabras del vocalista

- ¿Tal como me gusta? –

- Si, ya sabes, que todo el mundo se entere de que Frank y yo somos amantes… ¿Qué no es lo que quieres? Descubrirnos ante el mundo, obligarnos a aceptar públicamente algo que solo le interesa a quienes estamos en esta habitación, ¿Es tu plan, o me equivoco? –

- Esa no es mi intención – Mintió bajando la mirada, solo para encontrarse con los ojos claros de Frank que lo miraban fijamente – ¿Te doy el beso y me dejas salir? –

Asintió efusivamente, Noe se inclinó lo suficiente para tomar los labios de Frank entre los suyos, lo besó suavemente, y sintió que el guitarrista dejaba de abrazar sus piernas

- Me voy antes que Brian tenga un motivo para sacarme de acá –

- No te preocupes por eso Noe, jamás le permitiríamos a Brian que te aleje de nosotros, primero sale él que tu –

Gerard caminó hasta la puerta de salida, donde Noe lo escuchaba con una enorme sonrisa, el vocalista besó la frente del chico, abrazándolo apretadamente

- Te amo –

- Yo también –

- Yo también los amo – Informó Frank elevando un poco el tono de su voz

Noe cerró la puerta al salir, dirigiéndose de inmediato a la parte trasera del escenario, revisó su libreta de anotaciones para ver que le faltaba por hacer, todo estaba listo ya, solo faltaban los músicos en el escenario, se recostó en el armazón de acero que sostenía la plataforma, le sonrió a Bob que se acercaba con seguridad a él

- ¿Te gusta trabajar en esto? –

- No tienes idea, es mi pasión –

Bryar hizo una mueca con sus labios, meneando repetidamente la cabeza, sin mirar a Noe

- Yo conozco a mucha gente de la industria, de hecho creo que conozco a todos los que manejan las bandas de rock de este país –

- ¡Qué bueno! – Exclamó entusiasmado

- Si, es muy bueno… Noe – Bob hablaba calmadamente – Yo amo a esta banda, es mi vida, mis compañeros son más importantes para mí que mi propia familia, solo quiero advertirte, si haces alguna estupidez que arruine el balance perfecto que tememos, yo mismo me aseguraré que jamás encuentres trabajo en la industria de la música –

Y sin más el baterista subió las escalinatas hasta el escenario, dejando a Noe un poco más confundido de lo que estaba.

- Algo extraño está pasando –

Gerard frotó vigorosamente la toalla en su cabeza, se la acomodó sobre los hombros, y se sentó al lado de Noe encendiendo un cigarrillo

- ¿Así, sin más te dijo eso? –

- Si, y no lo invento, lo juro por lo que más amo que son ustedes dos –

- Yo creo que siguen enojados por lo que pasó en la disco – Frank se sentó junto a Gerard, robándole el cigarrillo

- Me la pase todo el concierto en un lado del escenario, no se imaginan la forma en que esos tres me miraban, parecía que querían matarme con la mirada, y no quiero ni salir de aquí, aun me falta la amenaza de Toro –

- Frank, creo que tendremos que hablar con ellos – En la voz de Gerard se notaba preocupación

- Antes, hay algo que deben saber, Brian me dijo que todos saben desde hace tiempo lo que pasa entre ustedes, que solo han callado para no dañarles la fantasía –

El guitarrista sonrió mirando cómplice a Gerard

- Nosotros sabemos que ellos saben, y sabemos que callan, y es divertido jugar con eso, no somos estúpidos Noe –

- Lo que no entiendo, es porque me están jorobando a mí, al fin que los adultos son ustedes, yo no los obligué a bailar conmigo en la disco, y si besar a Gerard iba a ser un problema, tu pudiste negarte Frank… me tratan como si fuera un demonio que solo existe para dañarlos a ustedes –

Gimiendo un poco, Gerard rozó su mejilla con la de Noe, girando su rostro para encontrar los labios del chico

- Un sexy demonio que me tiene completamente loco –

Durante el beso, Noe olvidó por un momento que se sentía amenazado, los labios dulces de Gerard eran la mejor medicina contra el miedo, y olvidando por completo que Frank estaba del otro lado de Gerard, se aferró al cuello del vocalista, besándolo sin descansar

- Bueno ya –

Ninguno de los dos escuchó a Frank, el guitarrista se vio en la obligación de separarlos, tomando fuertemente la cabeza de Gerard y atrayéndolo hacía él

- Esos espectáculos tan deprimentes, resérvenlos para cuando yo no esté presente, ¡Respeten! – Finalizó con una sonrisa

Gerard dejó su cabeza recostada sobre el pecho de Frank, y le sonreía a Noe, al tiempo que acariciaba las manos del guitarrista que lo abrazaban por completo

- Vete a desmontar equipos Noe, no sea que Brian se enoje, y habla con Ray, me muero por saber que te va a decir; Cuando lleguemos al hotel, yo hablaré con Mikey… - Levantó un poco su mirada, girando el rostro para ver a Frank – ¿Tú hablas con Bob? –

- Si, no queda de otra… Noe esta noche te toca dormir solo, porque pienso deshidratar a Gerard –

El chico meneó la cabeza sonriendo, besó a ambos en los labios y salió en dirección al escenario, Ray había terminado de ducharse y se había sentado en uno de los baúles del equipo, distrayéndose con un videojuego, Noe aprovechó la ocasión, sentándose junto al guitarrista

- Tú… ¿Qué tienes para decirme? –

Raymond despegó la mirada de la pantallita, ofreciéndole atención a Noe

- Decirte de qué –

- De lo que pasó en la disco, o tu amenaza contra mi –

- ¿Amenaza? Por Dios, cada día estás más loco, y sobre la disco… nada puedo decir, es culpa de Gerard y Frank que se comportaran como lo hicieron –

Noe respiró aliviado, levantándose del baúl

- Si sabes que si alguien se entera de lo que pasa, Gerard y Frank pueden ir a la cárcel por sostener relaciones sexuales con un menor –

- Lo sé -

- Entonces… - Se levantó también, guardando el videojuego en su bolsillo, mirando fríamente a Noe, elevando el tono de su voz - ¡Deja de joder Noel Duncan! Si te vas a revolcar con ellos, quédate callado y deja de exponerlos, con eso solo lograras meterlos en problemas –

- Pero Ray, mi intención no es… -

- ¡No me interesa que intención tengas! Es una advertencia Noe, si Frank o Gerard tienen problemas por tu culpa, es mejor te vayas del país, a donde no te pueda encontrar… soy una persona pacífica, pero si meten con mi “familia” me puedo convertir en una bestia, y créeme, no te gustará –

El chico se alejó con rapidez, concentrándose en su trabajo para no pensar en las palabras de Toro, pero lo que más le inquietó, es que el guitarrista lucía completamente enojado cuando lo dijo.

Algo no andaba bien, tenía al manager y al resto de banda en contra de él, lo más prudente sería apaciguar las cosas por un tiempo, decidió que ignorar su entorno sería lo mejor, al final lo único que importaba es que con Gerard y Frank las cosas estaban bien.

El sonido ensordecedor de un tablón del piso siendo lanzado con fuerza lo sacó de sus pensamientos, volteó a ver qué pasaba, y sobre el suelo las tripas y sangre de una rata se terminaban por desparramar

- ¡Cortez, asesino! –

Matt, levantó apenas la cabeza

- Estos animales se quedan entre los baúles, comiéndose los cables… - Se acercó a Noe sosteniendo el tablón en su mano, mirándolo de forma extraña – Es que se debe eliminar por completo todo lo que presente un problema, ¿No crees? –

- Su… su… supongo – Noe lo miraba aterrado

- Es bueno que lo “Entiendas” yo no solo soy el técnico de guitarras y quien reemplaza a alguno cuando es debido… yo también soy el exterminador de las ratas que se meten entre nosotros a querer sabotearnos… - Observó por largo rato el tablón en su mano, dirigiéndose a Noe nuevamente – Creo que esto le podría aplastar el cráneo a un jovencito… a alguno de 15 o 16 años, ¿No crees? –

Noe asintió con la cabeza, tenía los ojos completamente abiertos, y en su boca la saliva se había evaporado, retrocedió sin dejar de ver a Cortez que se reía con intensidad, dio media vuelta y salió prácticamente corriendo al bus.

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