miércoles, 9 de mayo de 2012

Amor en silencio; Capítulo: #2

Capítulo: #2

Unos leves rayos de luz me despertaban, abrí los ojos y lo primero que vi fue tu dulce carita, me mirabas sonriente ya no tenías la amargura del día anterior estabas feliz, sonriente. Algo te había pasado “que pasa?” te pregunté “nada, amanecí muy feliz” dijiste mientras corrías un mechón de pelo de mis ojos “vamos a desayunar, tengo hambre” acotaste “como siempre” dije riéndome.

Bajamos hacia la cocina y ambos preparamos nuestros desayunos. “y los chicos?” te pregunté “no llegaron anoche” constaste mientras servías un poco de café en mi taza.

Nos preparamos unas tostadas y luego fuimos a ver TV. Te acurrucaste cerca de mí y casi viertes café en mis pantalones. Me encanta como te ríes al ver dibujos animados, puedo darme cuenta de que aun eres un niño.

“Ger, me voy a bañar” dijiste y te levantaste del sillón.

Debía controlar estos deseos que nacían en mí cada vez que decías eso , como me gustaría estar contigo bañándome…ah! Gerard saca esos pensamientos de tu mente!! .

No tardaste mucho en salir del baño, traías el pelo mojado y una toalla amarrada a tu cintura “cochino, anda a bañarte” me dijiste “ok, ya voy” dije. Fui a mi pieza y elegí una pollera con cualquier jeans, no tenía ánimo de elegir atuendos. Fui al baño y me saque mi ropa, el solo echo de que te hayas bañado en esta misma ducha me excitaba. Tarde mucho tiempo en lavarme, estaba descargando mis pensamientos. De pronto el agua comenzó a salir muy fría. Me salí de la ducha muy rápido y me vestí. Salí del baño y tú estabas tirado en el suelo riéndote con unas enormes carcajadas “Frank!! Fuiste tú!!” grite un poco enojado “Gerard, discúlpame, no pensé que te ibas a enojar” dijiste muy apenado “No, Frank…discúlpame tú a mi…no estoy enojado” conteste tratando de no hacerte sentir mal “en serio no estas enojado?” me preguntaste mirándome a los ojos, lo cual me ponía muy nervioso “ger…” “em…que?” pregunté reaccionando “nada, vamos a comer a fuera?” me preguntaste sonriéndome “bueno, vamos” te conteste. Me agarraste de la mano y me sacaste fuera de la casa, tomamos un taxi y tú te acurrucaste en mí. El taxista nos miro y dio una pequeña sonrisa “es bueno, que los gay no tengan miedo de mostrar sus sentimientos” dijo el conductor “jaja no somos gay” dijiste riendo “él es solamente mi amigo” continuaste. Me duele aceptarlo pero eso es lo que soy, solo tu amigo y aunque sea esta la única forma en la que me ves me siento feliz ya que se que tenemos una hermosa amistad.

Llegamos al restaurante al cual íbamos, le pagaste al conductor y nos bajamos. Entramos en el restaurante y ordenamos lo mismo de siempre, ya éramos conocidos en el lugar, todos sabían que éramos simples amigos y por eso nadie nos miraba curiosamente. Se que este restaurante te trae malos recuerdo, aquí la conociste a ella, no se porque te gusta martirizarte tanto, ja ahora que digo martirizarte creo que yo hago lo mismo al estar cerca de ti. Si fuera más valiente tal vez te diría lo que siento, pero soy un maldito cobarde que intenta ocultar que es gay…que esta enamorado de su mejor amigo.

La mesera trajo nuestro pedido y tú no le quitabas los ojos de encima “te gusto, eh” te dije amistosamente pero por dentro me mataba esa frase “nah, es linda…pero. Nada más” dijiste mientras te echabas un pedazo de pan a la boca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario