sábado, 23 de junio de 2012

Revenge seekers; Capítulo: #25

Capítulo: #25

Demolition lovers.

Gerard empujó sus piernas con la fuerza suficiente para tumbar a Frank al piso, se levantó de la cama enojado, se descargó a patadas contra los pedazos de puerta regados por el piso

- ¡Qué demonios te pasa Frank!, esa puta droga ya te consumió lo poco que tienes de cerebro... ¡estas loco!-

caminó hasta Frank, se arrodilló a su lado, su mirada estaba llena de ira, Frank sintió miedo y antes que Gerard lo tocara con sus manos, levantó las piernas y le dio un par de golpes en el estómago, haciéndolo caer hacia atrás, se levanto para salir de allí, pero Gerard se aferró de las piernas de Frank, haciéndolo tropezar y caer de bruces al piso, Gerard se movió rápidamente, tumbándose sobre él, con todo el peso de sus cuerpo, sostuvo la cabeza de Frank contra el piso

- Nos vamos a matar o qué... ¡dime de una vez si eso es lo que quieres!-

Frank intentó moverse, zafarse de la presión que Gerard ejercía sobre él, usando toda la fuerza de sus brazos se impulsó, empujando a Gerard fuera de si, haciendo que su cuerpo cayera fuertemente al piso sobre su espalda, Frank se monto sobre él, reteniendo los brazos de Gerard pegados a su cuerpo con sus propias rodillas, se inclinó hasta estar muy cerca de su rostro

- No voy a descansar hasta que me perdones... y me ames de nuevo...-

Ambos estaban llenos de sentimientos cruzados de amor y odio, pero sobre todo de ese deseo por el otro que dominaba cada segundo de sus vidas.


Frank arrancó la camisa de Gerard, haciendo luego un marcado camino rojo, con sus uñas sobre el pecho de Gerard, un solo gemido se escuchó salir de esos labios, Frank no sabía si era de placer o de dolor, se inclinó un poco mas para lamer la sangre que tímidamente comenzaba a brotar del pecho de Gerard.

- Quítate de encima maldito animal, si no quieres que te rompa los huesos...-

Gerard hablaba con sus dientes apretados, pero ya no era por la ira, era esa desenfrenada pasión que lo estaba invadiendo en ese momento, ese deseo por Frank, ese amor maldito, que le producía sentimientos encontrados, se movió con fuerza, logrando liberar sus manos, tomó a Frank de la cintura y lo tumbó sobre el piso, sentándose encima de él, procurando que sus sexos quedaran juntos, friccionándolos, sintiendo con esta proximidad el deseo crecer aun mas.

- qué es lo que quieres Frank... ¿ah?.. ¡Dime!... que te perdone siempre, ¿qué te permita dañarme cada vez que se te de la gana, y que luego te haga el amor como si nada hubiera pasado?-

Gerard se agachó tomando fuertemente la cara de Frank entre sus manos

- yo no soy un maldito santo... y no sirvo para perdonar una y otra vez... qué quieres que haga ¡Dime, porque yo ya no sé!-

Frank miró los ojos acuosos de Gerard, la forma en que apretaba sus labios al mirarlo, la presión hacia que su labio sangrara mas, Frank sintió de nuevo ese deseo salvaje invadirlo, y con un gran esfuerzo por zafarse de las manos de Gerard levantó su cabeza, y mordió de nuevo el labio de Gerard haciéndolo sangrar mas, Gerard alejó su cabeza con furia, empuñó la camisa de Frank entre sus manos.

- ¡Maldita sea! Deja de morderme, pareces una bestia, que placer le encuentras al verme sangrar... ¿ah?-

Frank sonrió, entre tierno y malicioso

- Es que te ves demasiado bello, con esa sangre tan brillante rodando por tu piel tan blanca...-

- Deja de sonreír pedazo de idiota... un loco... eres un loco.. ¡Estoy enamorado de un maldito loco!-

Se levantó y camino hacia lo que quedaba de la puerta, sin que Frank lo viera, sonrió, dentro de sí le parecía muy sexy lo que Frank acababa de decirle, pero no lo iba a dejar ganar

- Lárgate de mi habitación... no soporto tu presencia un segundo más-

Frank se levantó con dificultada del piso, caminó en silencio hacia Gerard, aprisionando el rostro de este entre sus manos

- Te amo más que a mi maldita vida, deja el orgullo y ámame, Gerard... por favor no perdamos mas tiempo en esta absurda pelea... perdóname por enésima vez...-

Besó sus labios despacio, limpiando la sangre que brotaba del labio herido de Gerard, soltó su rostro y se alejó un poco, mirándolo, la expresión de su rostro se fue suavizando

- Yo tampoco puedo vivir sin ti, que no te das cuenta, que te amo tanto que no puedo pensar bien, tú eres como una droga Gerard, me mantienes en las nubes, tu amor embota todos mis sentidos, y me da tanto miedo dañarte que lo hago sin darme cuenta... aun no sé porque me amas, si lo único que traigo a tu vida es dolor... decepciones... deberías regalarme una bala de piedad en mi cabeza, así como las personas sacrifican a los animales que ya no sirven -

Gerard abrazó a Frank, abrigándolo cálidamente entre sus brazos, sus lagrimas caían sobre el rostro de Frank, combinándose con las de este

- no digas esas cosas, que a pesar de todos tus errores, es más la felicidad que me brindas, y mas cuando veo tu hermoso rostro, así tan cerca de mi, mirándome con tus ojos llenos de amor por mi...-


Tsuki se prendió de la baranda de las escalas

- se mataron Mikey.. no se oye nada, ya no se oyen ni gritos ni golpes... tu hermano mató a Frank...-

- No seas exagerada Tsu, mi hermano no es tan brillante como para hacer eso-

- Cómo así que brillante, no seas cruel Mikey, ¿por qué no lo quieres, a Frank?-

- Porque es un idiota, y lo mejor que podría pasarnos a todos sería que Gerard tuviera las agallas de meterle una bala en la cabeza...-

Tsuki le dio una mirada de desaprobación a su novio, empezó a subir las escaleras

- a donde vas, regresa para acá, si se matan que se maten, ¿a nosotros que nos importa?-

Tsu miró a Mikey, asombrada

- Cómo puedes hablar así, es tu hermano Mikey!!!-

Solo se encogió de hombros y regresó a la cocina, Tsuki continuó subiendo las escaleras, con miedo de encontrar a alguno de los dos apuñalado, o estrangulado, se imaginaba las peores cosas, pero sus ojos no estaban preparados para lo que vio, la puerta en pedazos en el piso, las sabanas y almohadas regadas por toda la habitación, la ropa de ambos tirada en el piso, sobre la cama y las mesas de la habitación, caminó despacio internándose un poco más, en el piso, junto a la cama pudo distinguir el rostro cubierto de sangre de Gerard, se asustó y se disponía correr hasta su lado, pero la espalda llena de tirillas de piel desprendidas y ensangrentadas de Frank la impactó, no sabía si llamar a Mikey, "van a terminar matándose este par de idiotas", estaba a punto de gritar el nombre de su novio, su voz se ahogo, al ver como Frank besaba, lamía, succionaba las heridas de Gerard, como si estuviera probando el manjar mas delicioso de la tierra, ella no sabía si la estaban viendo, tal vez si, pero parecía no importarles, y más cuando Frank levantó las piernas de Gerard sobre sus hombros, y se empujó hacia él, penetrándolo, con fuerza, las piernas de Gerard se cubrieron con la sangre de Frank, esparciendo gotas de esta por todo el piso, a causa del movimiento y el leve temblar de las piernas, el concierto de gemidos empezó.


Tsuki decidió que era tiempo de regresar con su novio, si bien no era la mejor situación para Frank y Gerard, de algún modo, ya estaban bien, o al menos eso aparentaban.

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