Revenge seekers; Capítulo: #3

Capítulo: #3

Cataclismo.

Frank anudó su corbata negra, se miró al espejo, su propia imagen era borrosa, las lagrimas no cesaban, su inocente y puro corazón jamás había sentido un dolor tan grande, tan desgarrador.

- Apúrate Frankie, el servicio fúnebre es a las 3:00, tu tío nos espera en el auto-
- Ya va tía, dame un segundo-

Tomó su abrigo, miró por la ventana, la tarde estaba gris, tenía un halo de tristeza, las nubes se apilaban grandes, ennegrecidas sobre el firmamento.

El ataúd bajó trabajosamente hasta el final, parecía que se negara a ser olvidado, como si el espíritu de su padre no quisiera abandonar esta tierra sin luchar por última vez, tal como lo hizo contra los ladrones defendiendo a su familia, pero tantas cuchilladas en el cuerpo de un hombre, inclusive en uno tan fuerte conllevan a la muerte, inexorablemente. 

Sobre la pila de rosas que caían a la tumba, Frank sumó un clavel blanco, que arrojó con trabajo, su propio dolor no le permitía actuar de forma coherente, la flor se asentó entre el rojo carmesí de las rosas, era algo particular, la blanca pureza del clavel resaltaba, “tal cual, como mi padre, siempre fue un clavel, en medio de las espinadas rosas”.

Frank vagó toda la tarde por el cementerio, no quería regresar a casa, su héroe ya estaba allí; la lluvia empezó a caer con fuerza, el viento la empujaba en todas las direcciones, Frank entró a un mausoleo, se quedó de pie, protegido del agua, mirando al vacío.

- ¿Un familiar?-

La voz que venía del interior lo inquietó, sin voltear respondió en voz baja

- Mi padre.-
- ¿Sabes?, dicen que cuando una persona buena muere, el cielo le rinde homenaje, dejando caer sus propias lágrimas-
- Era la mejor persona del mundo, el mejor padre del mundo...-

Frank no pudo continuar, cayendo de rodillas al piso, en medio de su llanto, el chico caminó hacía él, sentándose a su lado, dejó su cuaderno de dibujo en el piso, se quedó allí, mirando a Frank, acompañándolo, hasta que la lluvia, y el propio llanto de Frank cesaron, Frank al final vio el rostro del chico, lo miró a los ojos, y sin saber porque, tomó su mano

- Gracias-

Sonrieron tímidamente, Frank se levantó salió del mausoleo

- Gerard, me llamo Gerard, en caso que quieras saberlo-
- Frank, mi nombre es Frank-

Se devolvió un poco, tomó el cuaderno de dibujo de Gerard, le echó una mirada por encima

- Dibujas bien... bye Gerard-

«Anterior || Siguiente»