Capítulo: #9
Una combinación de lástima y terror envolvían el corazón de Nicholas Way, entendía perfectamente a Junior, una vez que el primer pensamiento de venganza se asienta en la mente, no hay vuelta atrás, no existe forma alguna de apaciguarlo, bueno, existe una, pero él no iba a permitir jamás que Junior se convirtiera en un asesino… ese era un peso enorme de cargar, y él lo sabía muy bien, después de tomar la primera vida, el resto eran más fáciles de arrancar, pero la carga de esos respiros frustrados siempre, siempre venían en la noche a atormentar el alma de los asesinos.
No podía disfrutar el momento que Junior le estaba regalando, el agua de la ducha le quemaba la piel, el frío de las baldosas se le calaba a los huesos, todo lo que podía hacer era ver al chico arrodillado frente a él, mirándolo sin pestañear mientras sentía la tibia boca de Junior envolverle por completo el pene, moviéndose frenéticamente, buscando sin éxito obtener una erección
- ¿Qué te pasa Nicky? – Junior retiró su boca, acomodando su mano sobre él - ¿No quieres? ¿Lo estoy haciendo mal?
- No… sabes que siempre lo haces todo bien… yo no puedo… no estoy de ánimo para… - Se inclinó levantando a Junior del piso, rodeándolo con sus brazos – Hoy no Junior, tengo muchos demonios que batallar.
- ¡Niños cochinos, salgan del baño! – Gerard golpeó la puerta del baño, riendo con ganas - ¡Cuando lleguemos a “fili” podrán volver a la luna de miel! –
Sin dejar de sonreír volteó a ver a Frank, que sentado en el borde de la cama veía fijamente el piso sin ninguna expresión en su rostro, bajó la cabeza, esta vez no podía complacerlo, él tenía que entender el peligro que representaba para ellos el volver a New Jersey. Junior salió del baño vestido, y con una cara peor a la que tenía su padre, le extendió la mano a Frank pronunciando un simple
- 50 dólares, tengo hambre –
Frank tan solo se movió para sacar el dinero de su bolsillo y entregárselo a Junior que salió de la habitación. Nicholas dejó el baño en bóxer, secándose el cabello con una toalla, se impactó un poco por la expresión vacía de Frank, era igual a la que tenía Junior cuando se despertó, palmeó el hombro de su padre y se sentó en la cama frente a Frank
- Tenemos que hacer algo, Junior ha sido picado por el deseo de venganza, me dijo que pasó la noche imaginándose que asesinaba a Palladinno, y la verdad, no pienso permitir que él se convierta en lo que somos.
- ¿Tu eres su papá para decir en qué se puede o no convertir mi hijo?
Frank habló sin pensar, sin levantar del suelo la mirada
- No, pero lo amo y no quiero que viva la vida que hemos tenido
Gerard se sentó junto a Nicholas, tratando de calmarlo
- No te preocupes por esas cosas Nicholas, Junior aun es un chico, son solo deseos de venganza, no creo que lo haya dicho en serio, además hace un minuto le pidió a Frank 50 dólares para comer, cuando te quieres vengar no piensas en comer
- ¡Qué! – Se levantó de inmediato, vistiéndose con rapidez - ¿¡50 dólares para comer!? Maldita sea, seguro se fue a tomar un autobús a Jersey
Salió corriendo de la habitación y en efecto Junior estaba en el borde de la carretera esperando por un autobús, llegó a él, halándolo de la ropa, llevándolo arrastrado hasta el parqueadero del motel
- ¡En qué demonios pensabas! Tu solo no puedes contra ese hombre, no seas iluso, no seas imbécil Gerard Junior – Respiraba agitadamente, desesperándose al pensar en lo que pudo haber pasado si Junior hubiese encontrado un autobús al momento de salir – Vamos a la habitación, debemos hablar los cuatro y encontrar una solución.
- Junior, ve a la habitación ahora – Frank apareció en el parqueadero, se paró con los brazos cruzados detrás de ellos y esperó a que su hijo obedeciera, pero Junior ni lo miró, tan solo resoplaba lleno de rabia porque Nicholas no lo soltaba - ¡Maldita sea Gerard Junior, te di una orden!
- No quiero ir a la habitación, no quiero irme a Filadelfia, lo que quiero es ir a matar a…
- ¡A nadie! No te mandas solo y no me obligues a usar la fuerza contigo, nunca lo he hecho, pero siempre hay una primera vez para todo –
Junior vio que los ojos de su padre irradiaban furia pura, agitó su cuerpo para liberarse de Nicholas y corrió a la habitación sin mirara atrás
- Te dije Frank, Junior no está jugando, estaba esperando un autobús para regresar a Jersey – Se paró frente a él, con los brazos cruzados también, mirándolo directamente a los ojos
- Eso veo… y si mi hijo es la mitad de lo que soy… no va a descansar hasta ver a ese tipo muerto
- Tenemos que hacer algo Frank, yo no quiero que Junior sufra la amargura de ser un…
- Asesino… como nosotros – Bajó la cabeza, girándola un poco para ver atrás, hacia la habitación en la que estaban Junior y Gerard - ¿Cuánto amas a mi hijo? – Dirigió su mirada a Nicholas al preguntar
- Más que a mi vida, lo sabes Frank
- Entonces, ayúdame a que no se convierta en lo que somos… ven conmigo ahora mismo a Jersey y traigámosle a Junior la cabeza de Palladinno
- Pero… mi papá…
- Tu papá puede cuidar de Junior, protegerlo mientras nosotros limpiamos el desastre – Frank le hablaba con calma, incluso en un tono bajo de voz, cómo si no quisiera ser oído por Gerard
- Bien, hablemos con mi papá a ver qué dice
- Yo no pienso pedirle permiso a Gerard… no necesito su consentimiento, en mi pantalón tengo mi SW 38 y la Colt de Gerard, me voy ahora mismo, tú decides si vienes conmigo y le calmamos a Junior ese deseo de venganza, o me dejas ir solo y te arriesgas a que me maten… y ahí sí Nicholas… el problema será mayor.
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