Escalofrío; Capítulo: #3

Capítulo: #3

Santificado sea tu nombre.

El tiempo paso. Había sido una tarde agradable. Un pecador menos, un gran helado en mi estomago contento.

Me hallaba frente al gran espejo de pie que tenia en mi habitación.
-Y bien?-Escuche-
Voltee.
-Creo que estoy listo.-Respondí-
Ella miro su reloj.
-Bien son las 23. A dónde quieres que te lleve?-Sonrió-
-No se....-Volví a mirarme en el espejo-
Se acerco y rodeo mi cintura con sus brazos.
Nos miramos por el espejo.
-Frankie...-Susurro- Quiero que festejemos tu cumpleaños. Que nos divirtamos como hace tanto no lo hacemos.
-Te parece que hoy no nos divertimos?-Respondí-
Rió.
-Si, pero nosotros dos. Solos. Nadie mas que nosotros. Iremos a “Sinners”, qué tal?.
La mire.
-Sinners?
-Hace cuánto que no vamos?
-Mucho tiempo ha pasado, cierto?
-Aja. Vendrás?
-Esta bien.-Sonreí-
Beso mi mejilla y me soltó.
Tome mi abrigo y salimos juntos.
Tomamos un taxi.
Antes de bajar de el, ya podía ver la gran cantidad de personas esperando entrar a este boliche.
Bajamos.
Mire el gran cartel.
-Sinners se tenia que llamar...-Murmure-
Mi hermana rió.
-Frankie, hemos pasado nuestra adolescencia aquí.
Sonreí.
-Lo se.
Caminamos paralelamente a las personas. Llegamos a la puerta.
Un gran guardaespaldas estaba allí.
Nos miro y sonrió.
-Los hermanos Iero???!-Grito- No lo creo!-Rió-
-Hola!-Dijo alegremente mi hermana-
Se acerco a nosotros y nos abrazo.
Este hombre seguía allí? No lo entiendo. Años habían pasado desde que deje de que ir a ese lugar, pero sin embargo seguía allí.
-Ay!-Dijo con dolor- Aire aire!-Trate de alejarlo-
Rió y nos soltó.
-Lo siento chicos! Qué hacen acá? No lo puedo creer.
-Bueno vinimos porque...-Dijo mi hermana-
-Es tu cumpleaños Frankie! Aun lo recuerdo!-Grito el interrumpiéndola-
Sonreí.
-Si lo es...-Baje la mirada-
Se alejo un poco de nosotros, indicándonos la entrada.
-Pasen, siempre son bienvenidos. Que tengas una buena noche Frankie y feliz cumpleaños.-Seguía sonriendo-
-Gracias.-Dije del mismo modo-
Entramos.
Pasamos por una sala bastante oscura, dejamos nuestras cosas, y seguimos caminando.
Los graves ya retumbaban en mi pecho.
-Wow...-Dije al entrar- Sigue igual.
Ella volteo y sonrió.
-Qué querías que cambie?
-No lo se!-Reí- Me trae tantos recuerdos!
-A mi también! Vamos!-Tomo mi mano-
Conseguimos una mesa junto a la barra, pedimos unas bebidas y nos sentamos.
Para mi asombro, había unos cuantos conocidos nuestros. Conocidos, no amigos. Yo soy su único amigo, como ella lo es para mi.
Nos saludamos, reímos un rato recordando viejas épocas.
-Bien! Los veré después!-Dijo uno yéndose-
Suspire.-
Ella sonrió.
-Qué?-Dije-
-Lo estas pasando bien.
-Si!-Grite-
-Me alegro mucho hermano.

Observe todo a mi alrededor. Voltee en mi asiento.
A lo lejos lo vi. No podía ser verdad. Estaba Gerard allí? Miro hacia nosotros. Rápidamente gire y la mire a mi hermana.
-Qué?
-Yo...-Hice una pausa-
-Yo?
-Yo lo vi.
-A quién?
-Gerard, esta allí atrás.-Voltee otra vez-
No estaba.
Ella volteo.
Nos miramos.
-En dónde? Frankie, creo que estas obsesionado con ese hombre. Yo no lo veo. Estas seguro de que lo viste?
-Si...-Dije mirando hacia todas partes-
-No se....-Suspiro- Yo no lo veo.
-Creo que iré al baño.-Me puse de pie-
-Esta bien.
Camine, esquivando a la gente.
Llegue a un pasillo, oscuro.
Tropecé con alguien. Mire.
Una pareja, besándose desaforadamente.
Sonreí y entre al baño.
Me acerque a la pequeña pileta.
Suspire.
-Debo dejar de pensar en Gerard.-Me dije a mi mismo mirándome en el espejo-
Abrí la canilla, me agache, junte un poco de agua en mis manos y moje mi rostro.
La cerré y me reincorpore.
Vi por el espejo a Gerard detrás mío.
Grite y salte hacia un costado.
-Maldición!!!!!! No hagas eso!-Grite mirándolo-
Sonrió.
-Lo siento Frank, te asuste?
-Si lo has hecho...-Trataba de respirar-
Silencio.
-Feliz cumpleaños.-Dijo-
-Cómo lo sabes?-Pregunte todavía jadeando-
-Se escuchaban desde mi mesa los gritos de tus amigos.
Sonreí nervioso y baje la vista.
-Gracias.-Respondí a su pregunta anterior-
Levante la vista, y lo vi como acercaba a la pileta.
Mojo su rostro.
-Y dime cómo lo estas pasando?-Secaba sus manos sin mirarme-
-Bien bien.-Respondí- Y tu?
-Bien, he venido a despejarme un rato.
-Ya veo..asustando a la gente.-Me queje-
Me miro por el espejo seriamente.

Algo no me gustaba de el. No se muy bien que era, pero había algo que me asustaba.
-Créeme que no sabes que es asustarse.-Respondió aun mirándome por el gran vidrio-
-A qué te refieres?
Silencio.
Una sonrisa iba formándose en sus labios.
-Frank! Estoy bromeando hombre! Relájate un rato quieres?-Rió-
-Lo siento...-Me disculpe- Últimamente estuve con mucho trabajo.
-Me imagino.
-Dime algo, estabas hace mucho tiempo aquí antes de asustarme?-Pregunte-
-No- Su rostro se torno con confusión- Por qué lo preguntas?
-Solo quería saber.
Ambos nos acercamos a la salida.
Al mismo tiempo pusimos la mano sobre la puerta para empujarla.
Nuestras pieles se tocaron.
Silencio. Mas silencio.
Espere unos segundos.
Nada paso.
Ninguna visión de él matando, o quizás maltratando a alguien.
No era pecador?
No era posible! O si?
Lo mire.
Alejo su mano.
No podía dejar de mirarlo, realmente no había pecado?
-Qué? Tengo algo en el rostro?-Sonrió-
-Cómo?
-No dejas de mirarme.
Quite mi mano de la puerta.
Y tome su mano.
Miro mis movimientos sin oponerse en lo mas mínimo, luego nuestros ojos se encontraron.
Espere unos segundos mas, creyendo que mi mente estaba haciendo una mala jugada.
Pero nada paso.
Solté su mano.
-Qué haces?-Preguntó-
-Lo siento...Yo...-No sabia que decir- Tuve un día muy raro. No me lleves el apunte.
Rió.
-Eres raro Frank!
Reí también.
-Si bueno....-Rasque mi cabeza- Lo soy.
-Qué harás luego de aquí?
Lo mire. Rogaba a mis mejillas que no tomaran color.
No se si lo hicieron, pero sentía que ardían.
-Ehm...Volver a casa, qué mas?
-Quieres acompañarme? Porque esta noche estaré solo, y la verdad es que...-Hizo una pausa- No quiero estarlo, quizás podemos tomar unas cervezas.
Silencio.
-No se, no he venido solo. Mi hermana esta conmigo.
-Julie?
-Así es.
-Seguramente esta con Mickey.
Levanté una ceja.
-Mickey?
-Mi hermano. Cuando los vimos, me dijo que la conocía. No se de donde realmente, pero seguro que debe estar hablando con ella ahora mismo.
-Ok, salgamos de aquí y hablare con mi hermana.-Conteste-
-Esta bien.
Salí primero de allí, voltee. Gerard me seguía.
Aquella pareja seguía allí, besándose pero esta vez sus manos volaban por sus cuerpos.
-No piensas que es tiempo de que vayan a un hotel?-Escuche en un susurro en mi oído-
Mi bello se erizo.
Reí.
-Si....-Apenas murmure-
Salimos y me acerque a mi mesa.
Como había dicho Gerard. Julie se encontraba con un chico bastante flaco, alto. Pelo color negro y pálido.
-Julie?-Dije mirándolos-
-Hey Frankie! El es Mickey! Y es hermano de Gerard! Puedes creerlo?
-Si puedo...-Voltee mirando a Gerard-
Todos sonreímos.
-Nos conocimos cuando éramos pequeños. Íbamos al colegio juntos.-Agrego Mickey sonriente-
Silencio.
-Te quedaras Mickey?-Pregunto Gerard-
-Por qué? Quieres irte?
-A decir verdad estoy algo cansado, pero puedes quedarte.-Respondió Gerard-
Nos miramos con Julie, supe que quería quedarse.
-Ustedes quédense, nosotros volveremos a casa.
-Volveremos?-Pregunto Julie-
-Si, vivimos en el mismo edificio, cierto?-Respondí, no quería darle a conocer de su invitación-
-Están seguros?-Pregunto nuevamente Julie-
-Si!-Dijo Gerard- Prometo cuidártelo. -Bromeo-
Reímos.
-Esta bien. Yo la cuidare a ella entonces.-Dijo Mickey-
Esa frase, no sonó nada bien a mis oídos. Pero ella sabia defenderse, así que me iría tranquilo de allí.
-Bien, entonces nos vamos Frankie?-Pregunto Gerard-
-Frankie?-Dije-
-Lo siento, Frank.-Se disculpo-
Sonreí.
-No, puedes llamarme Frankie. No hay problema.-Respondí-
Sonreímos.
Nos despedimos de ellos y salimos del lugar.
Pasamos a buscar nuestras cosas y salimos a la calle.
-Adiós Frankie! Que termines bien tu día!-Gritaron los guardaespaldas-
Gerard rió.
-Que bien! Tienes mas éxito que yo!-Bromeo-
Reí y e hice un ademán con la mano saludándolos.
-Quieres tomar un taxi? O volvemos caminando? Porque le he dejado el auto a mi hermano.
-No, caminamos.
-Seguro? No quieres tomar un taxi.?
-No-Lo mire- Por qué? Tu si?
-No!-Rió- Lo digo por ti, adoro caminar.
-Ah! A mi también.
-Bien, entonces por aquí.-Tomo el camino de la derecha-

Era una noche hermosa. Muchas estrellas en el cielo, hacia algo de frío. Esas eran las noches que yo amaba.
Hablamos de todo lo que puede hablar uno mientras camina. Su trabajo, quizás algunas cosas de la infancia, familia. Me contó sobre su banda. Reímos haciendo bromas.
De repente, era una persona bastante agradable con la cual daba gusto estar un tiempo compartiendo. Sonreía y yo me transportaba.
Todavía no puedo creer que no había pecado en el.
Era algo que mi mente no entendía. Pero me sentía feliz por eso. Significaba que en un futuro no debería matarlo.
Era un gran alivio.

Llegamos al edificio.
-Te digo que quedo allí tirado en el suelo y no lo podíamos levantar!!!!-Rió sacando las llaves-
Reí, me dolía el estomago de hacerlo.
-No puede ser!
-Si! Tres mesas tiro cuando cayo. Imagínate!
Reímos una vez mas y entramos.
Saludamos al señor de seguridad.
Mire el reloj.
Casi las tres de la madrugada.

Entramos. Luego de un rato estábamos en su casa.
Trate de hacer todo lo posible para parecer impresionado por su departamento, cuando lo conocía de memoria.
Se hacia difícil, pero lo podía manejar.
-Lindo lugar...-Me adelante-
-Gracias!-Tiro las llaves sobre el sofá- Te gusta?
-Si.
-No suelo venir siempre, solo cuando tengo un tiempo. La banda lo es todo para mi.
-Me imagino, es como tu escape, cierto?
Volteo.
-Exacto. Mejor no lo pudiste haber dicho. Escape.
Sonreí.
-Ponte cómodo Frank.-Señalo el sofá- Traeré algo para tomar.
-Ok.-Respondí-
Sonreí, no podía dejar de hacerlo. Por primera vez estaba allí, porque me habían invitado.
Me senté en el sofá.
Volvió. Lo mire.
Cargaba con unas dos botellas de cerveza. Se sentó junto a mi en el sofá, suspiro y encendió la televisión.
Pronto ella perdió importancia, comenzamos a hablar. Mientras las botellas, se acumulaban sobre la pequeña mesa, frente a nosotros. No dejábamos de reír.
-Mmmm-Dejo su botella de lado- Sabias que se llamaba Frank uno de los descubridores de los grupos sanguíneos?-Dijo mirándome-
Lo mire y reí.
-Jajajajaja, no. No lo sabia. Cómo sabes esas cosas?
-Mi hermano me lo dijo hoy a la noche, cuando le comente tu nombre.
-Interesante....-Dije con un tono muy ebrio-
-Santificado sea tu nombre Frank! Te imaginas siendo uno de los descubridores de los grupos sanguíneos?
Volví a reír.
-Si!!! Uh uh!-Levante los brazos-
Rió conmigo.
Apoye mi cabeza contra el respaldo.
-Estoy muy cansado y ebrio.-Confesé- No creo llegar hasta el ascensor- Agregue riendo-
-Puedes quedarte si quieres.
Lo mire.
-No Gerard-Cerré mis ojos- Me quedare un rato así, y luego me iré.
-Como quieras. Pero estas seguro de qué quieres irte?-Escuche en mi oído-
Abrí los ojos y lo mire. Seguía en la misma posición. No se había movido.
-Qué?-Pregunto-
-Nada...-Volví a cerrar mis ojos-

Sueño bastante raro, pero deseado. Gerard besaba mi cuello, jadeaba. Le rogaba “por favor no te detengas”, nuestras manos se movían. Estábamos mas que excitados.

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