Capítulo: #16
Desperté y él seguía a mi lado. Habíamos dormido abrasados y el parecía no tener la mínima intención de soltarme aún. Recorrí sus definidas facciones con la yema de mis dedos. Lo observé durante mucho rato. "Tan perfecto que eres, por Dios", pensaba. Me separé, para poder levantarme, pero provoqué su despertar.
— ¿Qué pasa? -preguntó abriendo perezosamente sus verdes ojos
— No quería despertarte, pero no lo logré -dejé un cortó beso sobre sus labios y fui hacia el baño.
— No te preocupes, de todas formas, ya me tengo que ir...-vi como se levantaba y se vestía.
— ¿Trabajo? -era sabado, día de trabajo para él.
— Aham. Al comic le ha ido muy bien, por lo tanto hay que trabajar más y mantenerse. -sonrió- ¿Tú que harás?
— También tengo que ir a trabajar y a la noche, tengo carrera. Vendrás a verme ¿Verdad?
— No lo sé, Frank. Sabes que me dan miedo.
— Pero si no corro moto hace tiempo...-lo miré tratando de convencerlo
— Está bien. Iré. ¿Dónde es? -dijo poniéndose la polera.
— Te paso a buscar a la noche. Llámame cuando llegues a tu casa.
— Okay. Nos vemos. -lo besé y se fué.
Luego de vestirme, fui a la habitación de Demi. Allí estaba la floja de mi hermana, durmiendo. Los recuerdos de cuando eramos pequeños estaban vigentes. La quería tanto.
— ¿Qué pasa? -me recosté a su lado
— ¿No puedo abrazar a mi hermana? -dije sonriendo y besando su frente.
— ¡Oh, Frankie! -sonrió- Es muy temprano...-ni siquiera había abierto los ojos.
— Es muy tarde, Demi. Son las 2:00 de la tarde. -se sentó en la cama.- ¿A qué hora llegaste anoche? -interrogué al ver unas enormes ojeras en su rostro. A diferencia de mi, ella tenía la piel muy clara.
— A las 11:00 creo. Cuando llegué estabas durmiendo...Abrazado a Gerard -me molestó
— Basta, Demi -me comenzó a hacer cosquillas en el estómago- Basta, en serio -ambos reíamos.-
— Okay. Se ven muy lindos juntos -me miró con ternura.
— Pues, muchas gracias. -reí- Ahora levántate, que es tarde. Yo me voy a trabajar ¿Si? -besé su mejilla
— Que te vaya bien. Te quiero. -sonreí.
{~ Narra Gerard ~}
Me sentía tan bien, que todo me parecía más bello. Todo estaba más iluminado. Ya casi olvidaba lo que se sentía estar enamorado. Tal vez, esté nuevamente enamorado, lo que cambiaría mi punto de vista filosófico. La teoría de platón ya no tenía sentido. Yo me había enamorado una vez, y ahora creo que lo estoy haciendo...Creo que Frank, está logrando enamorarme...
El día estuvo bien. Luego del trabajo me fui a comprar un café. Tenía unas ganas tremendas de tomarme un buen café y fumarme un cigarrillo.
— ¿Estás en tu casa? -preguntó Frank, desde el otro lado de la línea.
— Aham. Por eso te llamo.
— Okay, voy para tu casa. Te quiero. Nos vemos.
— Yo también, adiós -corté
Me fui a bañar y me puse ropa. Estuve escuchando música, mientras esperaba a Frank, para que me llevara a verlo a su carrera.
— ¿Listo? -preguntó
— Vamos -cerré la puerta y lo besé- Bob ¿No viene? -pregunté
— No lo sé. Lo llamaré. -recordé aquella vez cuando él me dijo que llamara a Bob. Esa orden que me había dado.
— ¿Y? -pregunté cuando ya había cortado la llamada.
— SI. Está allá. Él sabía llegar. -tomó mi mano. Se sentía extraño ir de la mano con él. No solamente por el hecho de ser un hombre (aunque en gran parte era algo extraño) si no también, por que hace tiempo que no le tomaba la mano a nadie- ¿Te incómoda?
— No. Para nada. Solo que es raro. Hace mucho tiempo no le tomaba la mano a alguien. -lo miré y me besó. Por nuestro lado iba pasando una mujer con un niño, al cual le tapó los ojos.
— Debería darles vergüenza –escuché
— ¿Vergüenza de qué? ¡Estoy malditamente enamorado de él y qué! -me tomó fuertemente del rostro y me besó ante el horror de aquella mujer. Cuando me soltó, ambos nos largamos a reír.
— ¡Estás loco! -tomé su pequeño rostro entre mis manos y lo besé con ternura.- Me encantas -dije sin despegar mis ojos de los suyos.
— Te quiero tanto, Gerard...tanto -besó fugazmente mis labios y seguimos caminando- Estaba pensando en alguna forma para celebrar cuando gane...
— ¡Todavía ni siquiera llegamos y ya crees que ganarás! ¡Eres un ególatra, Frank! -reí
— Estoy seguro de que ganaré. ¿Acaso tu no lo crees? -preguntó desafiante
— ¡Claro que sí! -lo besé sonriendo.
— Y como te decía, estaba pensando en como celebrar...-una carcajada maliciosa salió de sus labios
— ¿En qué estás pensando, Frank? -levanté una ceja
— No lo sé...-me soltó, me miró de pies a cabeza y mordió su labio
— Eres un pervertido, Frank -lo tomé de la cintura, y me importó un cuesco que nos viera quien nos viera.
— ¿Quieres celebrar conmigo? -me besó.
— Solo si ganas...Si pierdes...-negué con la cabeza. Me había vuelto tan gay con Frank.
— ¡Ganaré! Con ese incentivo...-lo besé - Ya, vamos que si no llegaremos tarde.
— ¿Tu moto? -preguntó al verme subir a su auto.
— La mandé a lavar. Pero debe estar allá ahora.
— Es raro verte aquí. Nunca te habías subido a mi auto. -aceleré
— Odio los autos -se quejó. Conversamos todo el camino. Él me daba las indicaciones de por donde me tenía que ir. Era un lugar bastante apartado, ya que nos demoramos cerca de una hora en llegar.
Había mucha gente...Muchísima gente. Nuevamente tenía esa sensación de que me ahogaba. A lo lejos pude ver como venían Bob, Ray y Matt. Se me hacía difícil mirar a Matt ahora, que sabía que había tenido algo con Frank. Si, me ponía celoso, cuando lo veía de muy cerca con él. Frank, se daba cuenta y reía. Le gustaba verme así.
— Ya es hora -dijo acercandose
— Que te vaya bien -dije algo enojado, ya que había estado conversando mucho rato con Matt
— No me digas que estás celoso, otra vez. Tonto -me tomó y me besó.
— Vete con Matt. Celebra con él, si quieres -sé que fue una pendejería, pero no estaba enojado en serio, solo estaba molestándolo.
— ¿Si? ¿Quieres que celebre con él? Perfecto. Luego no te quejes Way -se volteó para irse
— Ni se te ocurra -lo tomé por la cintura y lo besé- Suerte- guiñé un ojo y lo dejé irse.
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