Capítulo: #16
El sonido de las piedras removidas a cada paso de los intrusos los alertó, Gerard se levantó del piso plantándose frente a Frank, con temor de que la triada le hiciera daño a su amado, ninguno de los lideres de las tres razas habló, se limitaron a sonreír, al tiempo que cada uno sacaba su arma, Nélya desenfundó su espada, Yenoh tomó el par de dagas de su cinto y Doolb empuñó con fuerza su Báculo, no dieron espera, abalanzándose los tres sobre Gerard, clavando el filo de sus armas en su cuerpo, profunda y repetidamente, Frank intentó defenderlo, pero la fuerza de los tres era mayor a la suya, Gerard se desangraba frente a sus ojos, la neutralidad de la zona franca despojándolos de magia, poderes e inmortalidad, ayudaba a que el fin se precipitara, Frank intentó luchar, extrañamente la Vampiresa el Demonio y el Hechicero solo lo alejaban en lugar de dañarlo, buscó a su alrededor una forma de salvar a Gerard, y la pendiente resbaladiza que señalaba el camino hasta el inframundo le dio la solución, se metió entre los filos que ajaban la piel de Gerard, abrazándolo, dando traspiés hasta el borde de la colina dejándose caer con él hasta el inframundo, al menos allí podría hacer uso de su elementalidad para defenderlo, y la energía del inframundo sanaría las heridas de Gerard.
El magnánimo se levantó del piso, alistando el aguijón en su brazo sano, el iluminado extendió sus alas concentrando toda su energía en sus manos listo para atacar, la triada bajó aprisa, dejando sus armas a un lado, encarando a Gerard
- No podemos pedirte que renuncies y transfieras tu estatus de líder a ninguno de nosotros, nos has fallado, pudo más tu humanidad y el amor por tu enemigo que tu destino y tu propia razón de existir en el universo, la única forma de arreglar las cosas es eliminando tu cuerpo material y transmutar tu energía, quién de los tres lo logre, será proclamado el máximo líder de la oscuridad - Nélya habló con propiedad, sonriendo al decir la última frase - Y, esa, ¡seré yo! -
Sus colmillos se mostraron amenazantes al saltar sobre Gerard e intentar clavarlos en su piel, El hechicero concentró su poder en su báculo, arrojando contra el cuerpo de Gerard esferas cargadas de energía destructiva, debilitándolo en cada envío, Yenoh no se movió se quedo de pie esperando que Gerard se defendiera y de seguro con la ayuda de Frank vencería a sus enemigos, quedando ambos debilitados dejando a Gerard desprotegido, agotado y herido, listo para que el líder de los demonios mayores diera su estocada final.
Frank utilizó sus alas como escudo contra las emanaciones de energía del báculo de Doolb, respondiendo con su propia energía, hiriendo de muerte al hechicero, penetrando con su energía elemental el cuerpo místico de Doolb, logrando que todos sus órganos internos se llenaran de agua, causándole muerte por ahogamiento, su cuerpo se convirtió en cenizas y su energía transmutó al más puro estado, fundiéndose con la propia energía del inframundo.
Gerard logró evitar más mordidas tóxicas de Nélya, alistando su aguijón, clavándolo justo en el corazón de la vampiresa, asesinándola en el acto, al igual que Doolb, su energía se fundió con la del inframundo. Gerard miró a Frank quien se encontraba de rodillas, tratando de recuperarse de la debilidad que las esferas de energía habían causado en su elementalidad, olvidándose por completo de Yenoh, caminó con dificultad hasta el lugar donde Frank estaba
- ¿Estas bien, amor? -
Frank sonrió, apoyándose en los brazos de Gerard para levantarse
- Suena bien -
La sonrisa ingenua de Gerard y sus ojos cuestionantes le hicieron saber que no entendía a que se refería
- Eso de llamarme amor, suena bien... amor -
Sonrieron mientras se abrazaban fuertemente
- Si tuviera alma, corazón, sentimientos o alguna de esas estupideces humanas, de seguro me estaría derritiendo con el espectáculo, pero... los demonios no tenemos esas habilidades... o ¿debería llamarlas debilidades? -
Gerard se fijó en la aparente calma de Yenoh, esto le dio algo de confianza para hablar
- Qué vas a hacer ahora, ¿te nos enfrentaras también?, mira como terminaron ellos, ahora no son más que cenizas, y energía pura, latiendo conjuntamente con la energía del inframundo, sin conciencia, sin vida... -
- Dunkelheit, solo te lo preguntaré una vez, ¿dejaras que la humanidad enferma, vanidosa, egoísta que no siente respeto por ni por su propia vida, esa humanidad decadente que solo sabe dañar, y se olvidó del sentido real de lo que es vivir, continúe su paso por la tierra, exterminándola con sus abusos? -
- Yenoh, tu solo hablas desde el punto de vista de un demonio que ha pasado toda su eternidad en el inframundo, yo soy humano... -
- Fuiste, Dunkelheit, lo fuiste por un periodo de tiempo, y es esa misma negación de lo que eres lo que te ha llevado a cometer el error más grande -
- ¡No! Yenoh, puedo ser un condenado, pero siento como humano, pienso como humano y sobre todo, amo, como humano, te pido que busquemos entre los tres la forma de sanar la humanidad, de hacerlos reflexionar sobre sus errores... -
- ¡Por favor! el ultramundo y el inframundo llevamos siglos tratando de enseñarles, ellos nunca aprenden de sus errores, ¿por qué no puedes ver con claridad? la única solución es el exterminio, plantar una nueva raza de híbridos, no solo de condenados, los iluminados también pueden aportar -
Frank lo miró aterrado, no daba crédito a las palabras que Yenoh pronunciaba
- Crees acaso que la tierra es un laboratorio donde puedes jugar a crear, sobre todo tu, un ser cuya función esencial es la destrucción -
Yenoh caminó despacio hasta estar frente a Frank, justo al lado de Gerard, acomodó el velo que cubría la cicatriz de su boca, fijando sus ojos sobre los de Frank
- Licht Deswassers... tu y el Ultramundo solo quieren proteger la humanidad porque sin ella las irrisorias hadas se quedarían sin nada que hacer - giró su rostro para observar el de Gerard - ¿Seguirás con tu idea tonta de salvar la humanidad? -
Gerard alcanzó a pronunciar un categórico "Si", un segundo antes de que Yenoh sacara el aguijón de su brazo izquierdo y con fuerza lo clavara en su pecho, sacándolo rápidamente, para enterrarlo de nuevo con fuerza, Frank lo empujó, alejándolo de Gerard, pero Yenoh clavo ambos aguijones en las piernas de Frank, sacándolos para abalanzarse sobre Gerard. Sin poder sostenerse en pie le era imposible defenderlo, se aferró de la cintura de Gerard y desplegó sus alas alzándose en el aire, volando con tal rapidez que Yenoh los perdió de vista en cuestión de segundos.
el cap que sigue es el último.
Mil gracias por sus comenets.
No hay comentarios:
Publicar un comentario