Capítulo: #10
Ellos se fueron. Finalmente quede una vez mas sólo.
Volví a la cocina.
-Estas bien?-Pregunto Francisca-
-Si...-Murmure- Sólo es que...-Hice una pausa-
-Ah...-Suspiro ella leyendo mis pensamientos- He visto la escena, tienes que olvidarte Bob. Te hace daño.
-Lo se..-Tome un plato-
-Entonces? La vida es una sola hombre, no la desperdicies. No, ahora.-Sonrió-
La mire.
-Por qué no puedo ser como tu?
-Porque no pones las ganas suficientes, si lo hicieras serias como yo.-Respondió-
-Muy linda la filosofía de hoy, pero tenemos muchos pedidos.-Escuche-
Sonreí, y seguí con mi trabajo.
Aunque no podía dejar de pensar en el, Ray.
Soy una mala persona? No me duele hacerle daño?
Claro que no. Me duele y hasta lo mas profundo de mi corazón.
Hoy desee correrlo y gritarle: Lo siento!, para luego abrazarlo una hora seguida, como en los viejos tiempos. Pero mi maldito orgulloso, siempre ganaba.
Volví a casa desganado. Cansado, agotado, pero arrepentido.
Subí sin hacer escala alguna, a mi habitación.
Me deje caer en la cama.
Estuve así un rato, mirando la nada.
Nada.
Eso ocurría.
Si, era feliz con mi local, ganaba un buen dinero, tenia gente que valía la pena a mi lado.
Pero él no estaba.
Mi amigo, Ray.
-Demonios.-Murmure girando en la cama divisando el teléfono-
Este sonó, sonreí pensando que tenia poderes o algo por el estilo.
-Hola...-Dije sin muchas ganas- Mickey. Ah...-Suspire- Si? Pero..-Hice una pausa- Ira Ray? No lo se, esta bien. Sólo iré por Gerard. De acuerdo?. Nos vemos a la noche.-Corte la comunicación-
Según Mickey, Gerard llegaría con una sorpresa y todos nos reuniríamos en su casa a las nueve de la noche, para cenar.
Dos veces en el día ver a Ray? Debo haber hecho algo muy pero muy malo, para merecer este semejante castigo.
Encendí la televisión, si saber qué hacer.
Aun seguían transmitiendo nuestros videos en todos los canales de música.
Suspire al detenerme en uno de ellos.
-Famous Last Word. -Murmure-
Lo mire en silencio, mientras las lagrimas rodaban por mis mejillas.
Cerré los ojos y la apague.
-Al demonio con todo.-Gire para taparme la cabeza con la almohada-
Lentamente abrí los ojos, estaba todo a oscuras.
Salte de la cama y encendí la luz.
-Maldición!-Grite al ver que se me hacia tarde-
Tome un baño rápido, y me vestí sin prestarle mucha atención.
Ya estaba de mal humor, pero haría todo lo posible para no demostrarlo.
Era Gerard! Dios mío. Lo que doy en este momento, por un abrazo de ese hombre.
Hemos pasado tantas cosas juntos, que puedo decir “Lo amo”.
Si, amo a mi amigo Gerard.
Si tan sólo Frankie, estuviese aquí. Seria perfecto.
Claro, salvo por la presencia de Ray.
Pero trataría no llevarle el apunte, y disfrutar de las vacaciones de Gee.
Bob II.
Ellos se fueron. Finalmente quede una vez mas sólo.
Volví a la cocina.
-Estas bien?-Pregunto Francisca-
-Si...-Murmure- Sólo es que...-Hice una pausa-
-Ah...-Suspiro ella leyendo mis pensamientos- He visto la escena, tienes que olvidarte Bob. Te hace daño.
-Lo se..-Tome un plato-
-Entonces? La vida es una sola hombre, no la desperdicies. No, ahora.-Sonrió-
La mire.
-Por qué no puedo ser como tu?
-Porque no pones las ganas suficientes, si lo hicieras serias como yo.-Respondió-
-Muy linda la filosofía de hoy, pero tenemos muchos pedidos.-Escuche-
Sonreí, y seguí con mi trabajo.
Aunque no podía dejar de pensar en el, Ray.
Soy una mala persona? No me duele hacerle daño?
Claro que no. Me duele y hasta lo mas profundo de mi corazón.
Hoy desee correrlo y gritarle: Lo siento!, para luego abrazarlo una hora seguida, como en los viejos tiempos. Pero mi maldito orgulloso, siempre ganaba.
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Volví a casa desganado. Cansado, agotado, pero arrepentido.
Subí sin hacer escala alguna, a mi habitación.
Me deje caer en la cama.
Estuve así un rato, mirando la nada.
Nada.
Eso ocurría.
Si, era feliz con mi local, ganaba un buen dinero, tenia gente que valía la pena a mi lado.
Pero él no estaba.
Mi amigo, Ray.
-Demonios.-Murmure girando en la cama divisando el teléfono-
Este sonó, sonreí pensando que tenia poderes o algo por el estilo.
-Hola...-Dije sin muchas ganas- Mickey. Ah...-Suspire- Si? Pero..-Hice una pausa- Ira Ray? No lo se, esta bien. Sólo iré por Gerard. De acuerdo?. Nos vemos a la noche.-Corte la comunicación-
Según Mickey, Gerard llegaría con una sorpresa y todos nos reuniríamos en su casa a las nueve de la noche, para cenar.
Dos veces en el día ver a Ray? Debo haber hecho algo muy pero muy malo, para merecer este semejante castigo.
Encendí la televisión, si saber qué hacer.
Aun seguían transmitiendo nuestros videos en todos los canales de música.
Suspire al detenerme en uno de ellos.
-Famous Last Word. -Murmure-
Lo mire en silencio, mientras las lagrimas rodaban por mis mejillas.
Cerré los ojos y la apague.
-Al demonio con todo.-Gire para taparme la cabeza con la almohada-
Lentamente abrí los ojos, estaba todo a oscuras.
Salte de la cama y encendí la luz.
-Maldición!-Grite al ver que se me hacia tarde-
Tome un baño rápido, y me vestí sin prestarle mucha atención.
Ya estaba de mal humor, pero haría todo lo posible para no demostrarlo.
Era Gerard! Dios mío. Lo que doy en este momento, por un abrazo de ese hombre.
Hemos pasado tantas cosas juntos, que puedo decir “Lo amo”.
Si, amo a mi amigo Gerard.
Si tan sólo Frankie, estuviese aquí. Seria perfecto.
Claro, salvo por la presencia de Ray.
Pero trataría no llevarle el apunte, y disfrutar de las vacaciones de Gee.
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