Capítulo: #23
Una semana había pasado del regreso de Gerard con Frankie.
Pero todo parecía caer una vez mas. Al otro día, en aquella cena volví a discutir con Bob. Hace falta decir la causa? No, claro que no.
Otra vez, era aquel hombre necio, cerrado y cruel conmigo.
Pero no sólo eso había cambiado. Gerard me llamaba constantemente, diciendo lo preocupado que estaba por Frank. No comía, apenas hablaba con el y Jamia. No respondía a sus preguntas.
Lo único que me daba fuerza para seguir adelante, eran aquellas pequeñas estrellas que habitaban en el jardín, esperando por mi.
Sino fuese por ellos, no se en donde estaría ahora mismo.
Las lagrimas cayeron de la nada, quería dormirme. Mañana tenia que trabajar, pero no podía evitarlo. Esa tristeza que volvía a ocupar mi corazón, lo estaba destrozando.
El celular sonó.
Me asuste.
Encendí la luz y atendí.
-Hola?-Dije secando mis lagrimas-
-Ray!? Por dios! Que suerte que te encuentro! No puedo ubicar a Bob!-Hablaba muy rápido-
-Qué?-No entendía lo que decía- Pero qué paso?
-Me llamo Gerard. Frank se desmayo, sangra.
-Qué!?-Repetí poniéndome de pie rápidamente- Qué ocurrió?!
-No lo se! Llamo a la ambulancia! Nos encontramos allí! Estoy yendo con el auto.
-Pero esta bien?-Dije mientras me ponía los zapatos-
-No lo se, Gerard estaba muy mal. Apenas pude entenderle. Dijo algo de una discusión y de unos golpes contra una puerta. No se que ocurrió, pero perdió el conocimiento.
-Maldición! Ya salgo para allá!
-Bien! Apúrate! Nos veremos allí!
Colgué la comunicación, al mismo tiempo que el timbre sonó.
Baje corriendo las escaleras. Tomé mis llaves, el abrigo y abrí la puerta.
Bob.
-Ah..-Suspire- Ahora no! Debes escucharme!-Dije-
-No! Tu me escucharas a mi!-Entro empujándome-
-Qué!?-Me aleje- No! Extendí mis brazos- Bob! Debes escucharme! Te lo suplico!
-Estoy harto de ti! Por qué no te mudas y les facilitas las cosas a todos!? Sabes qué me dijeron hoy en la calle!? Por qué nos habíamos separado! Y les dije la verdad!- Gritaba demasiado fuerte- Que un traidor como tu –Me empujo y caí al suelo- Destrozo la banda!
Lo mire.
-Bob! Si, soy un traidor! Bien! Pero escúchame!-Trate ponerme de pie-
-No! Tu me escucharas!-Se sentó en mis piernas-
Forcejeamos. A esta altura de las circunstancias, no me importaba golpearlo con tal de salir de allí para ver a Frank.
-Ya basta! -Mi mano fue directo a su rostro haciendo que cayera a mi lado- Cállate Bob! Y escúchame.
-Me...-Tartamudeo- Me has golpeado...-Se toco el rostro- Nunca me golpeaste...
Tome aire, me puse de pie y le extendí la mano. La tomo, ubicándose frente a mi.
-Mira..-Dije- Lo siento, ok? Pero era la única forma para que te calmaras. Antes de que llegaras llamo Mickey, dijo que no te pudo ubicar. Frank esta herido.
-Qué!?-Me miro-
-Si, esta herido. Gerard llamo a la ambulancia, no se que ocurrió. Algo sobre unos golpes y una puerta. Por eso me iba, pero tu...-Respire- Siento haberte golpeado.
-Ah!-Grito- No me importa! –Tomo mi mano- Vamos! Debemos ir para allá.-Abrió la puerta-
-Quién demonios te entiende?-Dije siendo arrastrado por el- Me odias y ahora me llevas arrastrando?
-Cállate y camina.-Paro un taxi-
Rápidamente llegamos.
Nos encontramos con Mickey que bajaba de su auto.
Nos miramos.
El, tenia una copia de la llave de su hermano.
-Dios...Espero que este bien!-Abrió rápidamente la puerta-
-Gerard!?-Grite-
-En dónde estas!?-Agrego Mickey revisando la cocina-
-En el baño!-Escuche-
-Vamos!-Dijo Bob-
Subimos corriendo las escaleras y llegamos al baño.
Juro que no respire por unos minutos, al ver tanta sangre alrededor de ambos.
-Dios mío!-Grito Mickey cayendo de rodillas a su lado-
Gerard se hallaba sentado en el suelo, apoyando su espalda contra la pared. Frank se hallaba encima de sus piernas, con la cabeza en uno de los hombros de Gerard.
-No...-Lloro Gerard- No se que hacer, no deja de sangrar. No despierta...Dios...Apenas escucho su respiración. En dónde mierda esta la ambulancia!?-Grito- No puedo moverlo! No tengo que moverlo!
Reaccione. Me acerque a ellos.
Puse mis dedos en la muñeca de Frank.
-Puedo sentir su pulso...Qué paso?-Pregunte tratando de no entrar en pánico-
-No lo se, golpeo su cabeza contra la puerta.-La miro-
Todos nos hallábamos a su alrededor, miramos la puerta. Vimos claramente las manchas de sangre en ella.
-Pero, por qué hizo eso?-Dijo Mickey-
-No lo se...-Sollozó Gerard- Decía “quiero que se callen, los dos”.-Acaricio su pecho-
-Los dos?-Mire a Bob-
-Si...-Dijo Gerard- No entiendo, por dios...-Hizo una pausa- Vuelve Frankie, espera a que lleguen los médicos. Por favor...-Lloraba cada vez mas fuerte- No me dejes. –Apoyo su cabeza en el hombro.- No puedes dejarme, no ahora.
-Dios mío...-Dije tomando una de sus manos-
Escuchamos la ambulancia, y Mickey bajo corriendo las escaleras.
A los segundos, los médicos estaban en el baño.
-Qué paso?-Pregunto uno de ellos-
-Se golpeo la cabeza contra la puerta. No se cuantas veces...-Sollozo Gerard- Fueron muchas, no pude detener el sangrado. Por favor ayúdenlo. No lo moví, sólo se desvaneció en mis brazos.
-Bien.-Respondió- Hizo bien en no moverlo.-Miro a los otros médicos- A la cuenta de tres lo subimos a la camilla-
Tape mi boca, y las lagrimas rodaron por mi rostro. Me aleje para darles espacio.
-No puedo ver esto...-Voltee para encontrarme con Bob-
-Sh...-Dijo abrazándome- Estará bien.
-Es mucha sangre. Su pulso era lento Bob.-Apreté su espalda-
-Cálmate.
-Siento haberte golpeado.-Agregue-
-En algún momento lo harías. Sólo trata de calmarte.-Froto mi espalda-
Ray V.
Una semana había pasado del regreso de Gerard con Frankie.
Pero todo parecía caer una vez mas. Al otro día, en aquella cena volví a discutir con Bob. Hace falta decir la causa? No, claro que no.
Otra vez, era aquel hombre necio, cerrado y cruel conmigo.
Pero no sólo eso había cambiado. Gerard me llamaba constantemente, diciendo lo preocupado que estaba por Frank. No comía, apenas hablaba con el y Jamia. No respondía a sus preguntas.
Lo único que me daba fuerza para seguir adelante, eran aquellas pequeñas estrellas que habitaban en el jardín, esperando por mi.
Sino fuese por ellos, no se en donde estaría ahora mismo.
Las lagrimas cayeron de la nada, quería dormirme. Mañana tenia que trabajar, pero no podía evitarlo. Esa tristeza que volvía a ocupar mi corazón, lo estaba destrozando.
El celular sonó.
Me asuste.
Encendí la luz y atendí.
-Hola?-Dije secando mis lagrimas-
-Ray!? Por dios! Que suerte que te encuentro! No puedo ubicar a Bob!-Hablaba muy rápido-
-Qué?-No entendía lo que decía- Pero qué paso?
-Me llamo Gerard. Frank se desmayo, sangra.
-Qué!?-Repetí poniéndome de pie rápidamente- Qué ocurrió?!
-No lo se! Llamo a la ambulancia! Nos encontramos allí! Estoy yendo con el auto.
-Pero esta bien?-Dije mientras me ponía los zapatos-
-No lo se, Gerard estaba muy mal. Apenas pude entenderle. Dijo algo de una discusión y de unos golpes contra una puerta. No se que ocurrió, pero perdió el conocimiento.
-Maldición! Ya salgo para allá!
-Bien! Apúrate! Nos veremos allí!
Colgué la comunicación, al mismo tiempo que el timbre sonó.
Baje corriendo las escaleras. Tomé mis llaves, el abrigo y abrí la puerta.
Bob.
-Ah..-Suspire- Ahora no! Debes escucharme!-Dije-
-No! Tu me escucharas a mi!-Entro empujándome-
-Qué!?-Me aleje- No! Extendí mis brazos- Bob! Debes escucharme! Te lo suplico!
-Estoy harto de ti! Por qué no te mudas y les facilitas las cosas a todos!? Sabes qué me dijeron hoy en la calle!? Por qué nos habíamos separado! Y les dije la verdad!- Gritaba demasiado fuerte- Que un traidor como tu –Me empujo y caí al suelo- Destrozo la banda!
Lo mire.
-Bob! Si, soy un traidor! Bien! Pero escúchame!-Trate ponerme de pie-
-No! Tu me escucharas!-Se sentó en mis piernas-
Forcejeamos. A esta altura de las circunstancias, no me importaba golpearlo con tal de salir de allí para ver a Frank.
-Ya basta! -Mi mano fue directo a su rostro haciendo que cayera a mi lado- Cállate Bob! Y escúchame.
-Me...-Tartamudeo- Me has golpeado...-Se toco el rostro- Nunca me golpeaste...
Tome aire, me puse de pie y le extendí la mano. La tomo, ubicándose frente a mi.
-Mira..-Dije- Lo siento, ok? Pero era la única forma para que te calmaras. Antes de que llegaras llamo Mickey, dijo que no te pudo ubicar. Frank esta herido.
-Qué!?-Me miro-
-Si, esta herido. Gerard llamo a la ambulancia, no se que ocurrió. Algo sobre unos golpes y una puerta. Por eso me iba, pero tu...-Respire- Siento haberte golpeado.
-Ah!-Grito- No me importa! –Tomo mi mano- Vamos! Debemos ir para allá.-Abrió la puerta-
-Quién demonios te entiende?-Dije siendo arrastrado por el- Me odias y ahora me llevas arrastrando?
-Cállate y camina.-Paro un taxi-
Rápidamente llegamos.
Nos encontramos con Mickey que bajaba de su auto.
Nos miramos.
El, tenia una copia de la llave de su hermano.
-Dios...Espero que este bien!-Abrió rápidamente la puerta-
-Gerard!?-Grite-
-En dónde estas!?-Agrego Mickey revisando la cocina-
-En el baño!-Escuche-
-Vamos!-Dijo Bob-
Subimos corriendo las escaleras y llegamos al baño.
Juro que no respire por unos minutos, al ver tanta sangre alrededor de ambos.
-Dios mío!-Grito Mickey cayendo de rodillas a su lado-
Gerard se hallaba sentado en el suelo, apoyando su espalda contra la pared. Frank se hallaba encima de sus piernas, con la cabeza en uno de los hombros de Gerard.
-No...-Lloro Gerard- No se que hacer, no deja de sangrar. No despierta...Dios...Apenas escucho su respiración. En dónde mierda esta la ambulancia!?-Grito- No puedo moverlo! No tengo que moverlo!
Reaccione. Me acerque a ellos.
Puse mis dedos en la muñeca de Frank.
-Puedo sentir su pulso...Qué paso?-Pregunte tratando de no entrar en pánico-
-No lo se, golpeo su cabeza contra la puerta.-La miro-
Todos nos hallábamos a su alrededor, miramos la puerta. Vimos claramente las manchas de sangre en ella.
-Pero, por qué hizo eso?-Dijo Mickey-
-No lo se...-Sollozó Gerard- Decía “quiero que se callen, los dos”.-Acaricio su pecho-
-Los dos?-Mire a Bob-
-Si...-Dijo Gerard- No entiendo, por dios...-Hizo una pausa- Vuelve Frankie, espera a que lleguen los médicos. Por favor...-Lloraba cada vez mas fuerte- No me dejes. –Apoyo su cabeza en el hombro.- No puedes dejarme, no ahora.
-Dios mío...-Dije tomando una de sus manos-
Escuchamos la ambulancia, y Mickey bajo corriendo las escaleras.
A los segundos, los médicos estaban en el baño.
-Qué paso?-Pregunto uno de ellos-
-Se golpeo la cabeza contra la puerta. No se cuantas veces...-Sollozo Gerard- Fueron muchas, no pude detener el sangrado. Por favor ayúdenlo. No lo moví, sólo se desvaneció en mis brazos.
-Bien.-Respondió- Hizo bien en no moverlo.-Miro a los otros médicos- A la cuenta de tres lo subimos a la camilla-
Tape mi boca, y las lagrimas rodaron por mi rostro. Me aleje para darles espacio.
-No puedo ver esto...-Voltee para encontrarme con Bob-
-Sh...-Dijo abrazándome- Estará bien.
-Es mucha sangre. Su pulso era lento Bob.-Apreté su espalda-
-Cálmate.
-Siento haberte golpeado.-Agregue-
-En algún momento lo harías. Sólo trata de calmarte.-Froto mi espalda-
No hay comentarios:
Publicar un comentario