martes, 25 de junio de 2013

How the misery begins; Capítulo: #5

Capítulo: #5



Bob I.

-Si yo no pongo orden aquí, nadie lo hace?-Grite-

Todos me miraron.

Sonreí.
-Lo siento chicos, pero vamos!-Chasquee mis dedos- Todos sabemos que el almuerzo y la cena con las comidas más importantes! No pueden equivocarse con los pedidos! Perdemos clientes, comida, y dinero!-Sonreí-
-Esta bien Bob! Pero no trabajamos bajo presión!-Sonrió ella-

Reí.
-Ya ya...-Agite mis manos en el aire- El pedido de la mesa diez esta listo, y el de la mesa tres también.-Adornaba los platos-
-Bob, sabes lo que durara eso? Segundos. Deja de darle tanto tiempo a la decoración.-Comento Francisca mirando por encima de mi hombro-
-No interesa, la comida primero entra por los ojos. Ya veras que luego alguien comentará sobre la presentación.-Sonreí-
-No cambiaras nunca.-Se fue riendo-
-No no.-Termine de acomodar-



Chef.
Si, soy chef. No tengo vergüenza de decirlo.
Siempre quise serlo, tener mi propio restauran. Y lo logre. 
Costo esfuerzo, pero tenia el dinero suficiente.
Solo era cuestión de conseguir unos cuantos buenos cocineros, y lugar para habilitarlo.
Un tío lejano me salvo la vida.
Había comprado este local para hacer una panadería. Contaba con una gran cocina.
La longitud de ella era excelente. El horno era el mejor que había visto en mi vida.
Estuve meses siguiéndolo, llamándolo, mandándole emails, hasta le enumere cada razón de porque debía venderme este local.
Luego de un mes lo logre.
Y era feliz con mi cocina y mi gente.
Había formado un gran equipo, gente confiable, agradable para el ambiente laboral, eficaz, abiertos a cualquier critica o consejo, con ansias de aprender.

Además, debía hacer algo para olvidar aquel desastroso día.
Sabia que no podía vivir dando clases de batería.
No quería hacer nada que me recordara a Ray.
Trato de no odiarlo, juro que lo traté. Pero no puedo. Simplemente, no puedo.
Yo también estaba harto de las discusiones, pero no por aquel motivo iba a recomendar la separación de la banda.
Podría haberlo hecho cuando me chamusque la pierna en el video, cierto?
Podría haber mandado todo al demonio, en aquel momento.
Pero no lo hice, aguante la rehabilitación, el inmenso dolor,  los comentarios y rumores estúpidos de la prensa y salí adelante.
No era la hora de irme de este mundo, no aun.

Pero aquí estaba, solo. A veces me reunía con Mickey o Gerard.
Seguíamos viviendo cerca. Aunque Gerard ahora era profesor.
De vez en cuando nos reuníamos los cinco a cenar u almorzar aquí, en mi restauran, que por cierto su nombre es “ Bob´s Provisions”, si es algo estúpido el nombre. Pero en su momento fue gracioso y encastraba con mi personalidad.
Como les comentaba, nos reuníamos alguna que otra vez. Pero mi maldita y gran bocota nunca podía cerrarse, y siempre terminaba acotando algo sobre la separación.
Luego comenzaba a discutir con Ray.
Yo lo llamaba “Los cuatro sucesos”.

1) Comíamos.
2) Bob abría su gran bocota.
3) Discutía con Ray
4) Todos nos íbamos de allí enojados, tristes, y fastidiados.

Sé que no debía hacerlo. Se supone que teníamos que aprovechar de ese pequeño tiempo que compartíamos como amigos, de lo único que quedaba entre nosotros.
La amistad.
Pero no podía callarme. Era tanta la bronca que tenia, que siempre arruinaba todas las reuniones.
Hubo momentos en donde Gerard y Frank, estaban empecinados en golpearme.
Créanme, que si no hubiese sido por Mickey o Ray, estaríamos todos con mas de una cicatriz.
No entiendo porque lo defienden tanto.
Estuvo mal lo que hizo! Muy mal.

*****

-Maldito Ray...-Murmure-
-Deja a Ray tranquilo, y termina con ese plato que ya el cliente esta preguntando por qué tarda tanto el pedido.-Dijo Francisca-
-Dios mío!!! Hay una cucaracha en la comida!!!!!-Se escucho en un grito-
-Qué!!!!?????-Grite alarmado levantando la vista- Idiotas!!!!!-Sonreí luego-
-Hola Bob!-Dijo Mickey riendo con sus amigos-

Eran los únicos que tenían permiso para entrar en ella.

-Hola chicos, vienen a almorzar?-Sonreí entregando uno de los platos al mozo-
-Exacto, aunque...-Olió Josh una de las ollas- Siempre me pregunto si puede tener veneno...-Sonrió- O peor aun, podrías haber escupido allí adentro!!!
-Jajajajaja!-Reí- No me des ideas.-Sonreí- Mickey, dile a Paul que te de una mesa. Y hagan el pedido luego los acompañare.
-Está bien.-Dijo Mickey volteando- Hasta luego chicos!!!-Grito-
-Hasta luego!!!-Gritaron todos-

*****

Necesitaba un almuerzo entre amigos.
Mickey tenia buena compañía, siempre me hacían reír.
Finalmente lograron dejarnos una mesa libre entre tantos clientes.
Me senté justo cuando trajeron nuestro pedido.

-Mmmm-Trataba de tragar Mickey- Esta delicioso Bob. Has reclutado buena gente.
-Como te odio.-Fue lo primero que dije, pero sonriendo- Mira como comes, y no aumentas un solo maldito gramo.
-Son los genes...-Sonrió-
Todos reímos.

Luego de un rato, ya habiendo pasado por una gran copa de helado como postre, note que Mickey sonreía.
Voltee.
Lo que me faltaba.
Ray.
-No Mickey...-Murmure-
-No seas malo, muchas veces ha venido a comer. Te da plata.
-Si es por mi cerraría el local.-Respondí-
-Eres malvado. No entiendo tu odio hacia el.
-Hizo que la banda se separara. No te basta?-Lo mire- O debe matar a alguno de nosotros para que tu también lo odies.?-Respondí-

El resoplo ante mi respuesta, frutado, harto de la situación.
Ray se acerco a nuestra mesa, saludando a cada uno.
No quería saludarlo, pero no perdía nada con hacerlo.
-Siéntate.-Dijo Mickey haciéndole un espacio-
Lo mire con odio.
-No creo que sea bienvenido.-Dijo el mirándome-

Sonreí sarcásticamente.
-Acaso lees mi mente?-Dije mirándolo fijamente-
-Bob! -Dijo Mickey-
-No, déjalo.-Se puso de pie- Comeré en otro lugar. No es el único restauran en la zona. Que tengan un buen día.-Se fue del local rápidamente-
-Eres cruel.-Dijo Josh mirándome-
-No te metas en esto. Además.-Apoye mis codos sobre la mesa- Qué harías si un integrante de tu banda es el culpable de la separación?-Dije-
-Lo mato.-Respondió-
-Josh! –Dijo Mickey- Deja de darle la razón, comete tu helado y volvemos al trabajo.
Silencio.
Un día mas, arruinado por Ray.

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