miércoles, 26 de marzo de 2014

Is that... You make me feel so special; Capítulo: #10

Capítulo: #10

{*Narra Gerard*} 

Me sentí humillado. Estaba recibiendo raras señales de parte de Frank... Primero parecía gustarle y después me manda a la cresta de un golpe. Aun seguía en el suelo mirando a Frank, que se veía impactado ¿Por qué? si el golpe lo recibí yo, no él. Me puse de pie, le di una mirada rápida a Frank nuevamente y salí de su habitación. Fui a caminar por las calles, no quería estar cerca de él. Me daba rabia vivir en ese lugar, donde no conocía nada ni a nadie. 

- ¡Gerard! - escuché tras de mí la voz agitada de Frank. No me quise voltear, seguí caminando. - ¡Gerard! - apuré aun mas el paso. - ¡Gerard, por favor! - logró alcanzarme, me agarró del brazo y me dio vuelta. Solo lo quede mirando. - Lo siento... En verdad no quis...
- Está bien - interrumpí.
- Pero déjame hab...
- Está bien, Frank. No te preocupes - me di vuelta y comencé a caminar nuevamente.
- Es que si me preocupo - se puso frente a mí.
- ¡¿Por qué!? - se notaba la angustia en mi voz. Frank miró el suelo. - Me confundes, cambias de actitud a cada momento. 
- ¿A caso no es lo mismo que hacías tú en un principio? - dijo mirándome de nuevo y subiendo el tono de la voz. 
- no me saques eso en cara. Lo reconocí, te pedí perdón e intenté cambiar eso. Y creo que lo he logrado. - Seguía callado, mirándome - Te dije que no fingiría más estando contigo y quería que tu hicieras lo mismo.
- No he fingido nada estando contigo.
- ¿Entonces por qué actúas diferente todos los días? - Frank comenzó a mirar a otro lugar, como evadiendo mi pregunta, hasta que volvió su vista hacia mí.
- No lo sé... No eres el único confundido aquí.
- ¡Frank! - se escuchó una voz forzada al otro lado de la calle, Frank se volteó. 
- Bob - dijo bajo Frank, me miró nuevamente. Yo solo me di media vuelta y seguí caminando. 

{*Narra Frank*}

Vi como Gerard se iba alejando a medida que iba caminando por las calles. Me quedé mirándolo bobamente y sentí una palmeteada en mi espalda. No me giré, pero Bob se cruzó frente a mí, mientras yo aun observaba a Gerard.

- ¿Qué te pasa, Frank? ¿No estás contento de verme? - yo no respondí. Bob dirigió su vista hacia donde se posaba la mía. Puso una cara de confusión al ver que yo estaba tan perdido mirando a Gerard. 
- ¿y tu no estabas enfermo? - dije antes de que Bob me preguntara cualquier cosa que yo no quisiese responder. Se volteó a mirarme nuevamente. No me respondió. Me conocía demasiado bien, él sabía que algo pasaba.
- Estaba muy aburrido, no aguantaba más... - Estaba agradecido de que me siguiera la corriente - ¿Qué pasa? - dijo serio. Está bien, aquí viene la lluvia de preguntas.
- Nada - dije yéndome.
- Oh Frank, ¿por qué eres así conmigo? antes me contabas todo... ¡Todo! - comenzó a seguirme.
- Bob - me detuve - hay ciertas cosas que ni yo me entiendo.
- Quiero seguir siendo tu mejor amigo, Frank. Por favor, déjame ayudarte. Quizás pueda.
- No puedes - comencé a caminar nuevamente. 
- Enano, por favor. No quiero dejar de comunicarme contigo. ¿A caso ahora Gerard es tu perra del sexo oral? - Cuando Bob dijo esto me vino un ataque de risa, él siempre salía con sus tonterías que finalmente me hacían ceder. 
- ay - di un largo suspiro - ¿me acompañas? - Me convenció, estaba dispuesto a contarle todo lo sucedido. Es mi mejor amigo ¿por qué no? Fuimos hasta una plaza y nos acomodamos bajo un árbol.
- Hace tiempo que no veníamos - dijo Bob sonriendo.
- Lo se. - hubo un silencio incómodo. Sabía que tenía que contarle todo a Bob. 
- ¿Y? - Lo miré - ¿Qué pasa?
- Bob... Esto es difícil de contar. La verdad es que ni siquiera tengo muy claro lo que te tengo que contar - lo miré confuso, él tenía la misma mirada.
- ¿Tuviste problemas con Gerard? - Asentí con la cabeza - ¿Te hizo algo?
- Mm... 
- ¡Vamos Frank! dime...
- Mejor te contaré todo de una vez, pero promete que no me preguntarás nada, ni me mirarás - Bob frunció el ceño. - Promételo
- pero ¿por qué no te podré mirar? - dijo chistoso
- Promételo Bob - odiaba tener que suplicarle.
- Está bien - dijo resignado.
- Desde que llegó Gerard, me he sentido extraño, él me hace sentir incómodo, pero de una manera que no lo hace cualquiera. Su mirada constante siempre me confunde...
- ¡¿Te está acosando?! - Bob dio un salto, que hasta me atoré con mi propia saliva.
- ¡Booooob! te dije que no hablaras. Cállate.
- Pero...
- Cállate o no te cuento nada - lo interrumpí. 
- Está bien.
- Bueno... Eh... ¡Ash! Bob se me olvido lo que te tenía que contar - dije intentando recordar donde había quedado.
- Me dijiste que Gerard te estaba acosando y luego me hiciste callar.
- No me acosa, tonto. - Hice una pausa y seguí - Bueno, el asunto es que en estos días las cosas con Gerard han estado extrañas. A veces me sentía muy cercano a él y creo que eso me confundió - a Bob se le dibujaba un signo de interrogación en su rostro - ayer y hoy... han sucedido cosas... entre Gerard... y yo. - miré el suelo me daba vergüenza contarle esto a Bob. - Hemos... estado apunto de besarnos - esto último lo dije tan bajo que fue inaudible.
- ¿Qué? - dijo Bob.
- Ash... que hemos estado a punto de besarnos - lo dije algo más fuerte y Bob abrió los ojos a más no poder, comenzó a mirar hacia todos lados intentando decir algo, pero ni siquiera le salían las palabras.
- ¡Frank! 
- Lo sé, lo sé. Te dije que no era algo fácil de contar y no cumpliste tu promesa.
- Obvio que no, porque pensé que era algo más... normal. - Sentía tanta impotencia, confusión y rabia a la vez. Odiaba los momentos como estos en que me desconocía por completo. No sabía que pensar, ni que hacer. 

- Bob... no se que hacer - dije quebrando mi voz. Las lágrimas se asomaron por mis ojos y elevé mis manos hacia mi rostro, tapándolo.
- oh no, Frank. Lo siento - dijo acomodándose a mi lado, para así abrazarme. - Lo siento, lo siento. Fui un estúpido. - Yo permanecía en silencio, acogido por los brazos de Bob.
- Nunca había sentido tanta rabia conmigo mismo.
- No Frank... No tienes que tener rabia. Solo estás confundido y es normal, ya que siempre te han gustado las mujeres y eres un galán, pero... Tienes que ver de qué manera logras ser realmente feliz.
- Pero ¿con un hombre? - dije saliendo de entre los brazos de Bob, para así mirarlo a la cara.
- Eso no importa, Frank... Con tal de que ese hombre no sea yo... - Otra vez Bob me hacía reír de manera estúpida. 
- Eres un tonto. - él me sonrió - Pero... es el hijo de Donald.
- ¡Oh! Es verdad, se me había olvidado por completo que es casi tu hermano.
- Gracias por tu apoyo, Bob - dije irónico.
- Lo siento... Pero, ¿en verdad estuvieron a punto de... besarse? 
- Si - dije tímido - la primera vez fue en mi cuarto, pero interrumpieron mis padres... Y la segunda fue en el balcón, pero mi mente reacciono de manera negativa... a tal punto de... golpearlo.
- ¡¿Qué?! - dijo Bob sorprendido.
- Si... no veía otra manera.
- ¡Oh! jajaja no veía otra manera - dijo riendo e imitando mi voz - ¿no te podías alejar y ya?
- Es que, no se... solo me salió. - comenzó a reír de nuevo - Bueno, pero... ahora ¿cómo le digo lo que siento a él, si no me quiere ni ver con lo que le hice?... y bueno, la verdad es que tampoco me atrevo. 
- Mm... Pues... cuando yo no puedo expresarme verbalmente, lo hago mediante cartas. Es así como digo todo lo que siento, sabiendo que la otra persona no me podrá interrumpir y me puedo expresar libremente. Aunque recuerdo que... una vez estábamos enojados y te escribí una carta para reconciliarnos y tú la botaste a la basura en mi cara. - dijo con tristeza en su rostro.
- jajajaja, pero eso fue porque yo, en verdad estaba MUY enojado - dije no pudiendo evitar la risa. 
- ¿y? Tú lo golpeaste, ¿crees que está feliz? 
- No, pero nada pierdo con intentar - dije sonriendo ampliamente - Gracias Bob, te quiero. - dije abrazándolo.
- sale... niño gaysh jajajaj
- ¡Já! - dije irónico. Él sonrió y me abrazó otra vez. 
- Yo igual te quiero gaysh. ¡Suerte! - dijo yéndose. 
- Gracias, adiós.

Fui directo hacia mi casa. A penas entré me dirigí a mi cuarto, estaba muy ansioso con la idea de la carta. Busqué lápiz y papel y comencé a "expresarme".


No hay comentarios:

Publicar un comentario